Andrea Janeiro se encuentra en California cursando un máster en comunicación. La joven está profundamente comprometida con sus estudios, y su madre, Belén Esteban, se muestra muy orgullosa de ella, como ha compartido en varias ocasiones a través de sus redes sociales. “Mi niña salió de casa hace 7 años, primero para estudiar en Londres y luego en Los Ángeles. Han sido años duros, de muchas despedidas, de muchas lágrimas y viajes en avión, pero ella siempre tuvo claro lo que quería. Gracias a su esfuerzo, dedicación y constancia, ahora está logrando aquello por lo que tanto luchó”, escribía Belén.
“Ha terminado una carrera y ha completado dos másteres. No imaginas lo felices que estamos todos: tu madre, Miguel, la Yaya, tus tíos y primos, tus amigos, y toda la gente que te queremos. Soy la madre más orgullosa del mundo. Te queremos muchísimo”, concluyó Esteban.
Estas palabras son vistas como una clara indirecta hacia Jesulín de Ubrique, quien no ha mantenido una relación cercana con su hija ni ha mostrado interés en su educación. Cuando Andrea ingresó a la universidad, Belén pidió apoyo económico a Jesulín, pero él se negó, argumentando que estudiar fuera de España era un lujo innecesario. A pesar de esto, Belén Esteban ha demostrado que no necesita la ayuda del padre de su hija, ya que cuenta con los medios para apoyar a Andrea por su cuenta.
Andrea Janeiro se hace de oro con Jesulín de Ubrique
Jesulín de Ubrique no ha aportado económicamente para los estudios de Andrea Janeiro. A pesar de su considerable patrimonio y sus cuentas en orden tras varias dificultades financieras, incluyendo su sociedad ‘Taurovox’, que sin actividad empresarial desde 2014, generó ingresos por más de 200.000 euros en 2023. Jesulín también participa en otras empresas: ‘Lodoja SL’, ‘Explotaciones Ganaderas de la Sierra de Rosalejo SL’ y ‘Correcostas 121 SL’. A lo largo de los años, ni Belén Esteban ni Andrea han solicitado su apoyo financiero; de hecho, él nunca le ha proporcionado pensión ni cubierto sus estudios, limitándose a regalarle una muñeca Barbie de 20 euros cuando ella tenía 23 años.
Según la revista Lecturas, Andreíta ha estado ahorrando todos estos años los 1.200 euros de pensión que le ha pasado su padre cada mes, gracias al apoyo económico de su madre. Hoy Andrea puede gozar de una cuenta corriente saneada que puede superar con creces los 260.000 euros.