Si hay alguien que duda de Lewandowski, no es tan culé como parece. El polaco ha cambiado completamente el talante y en lugar de estar a punto de colgar las botas, parece que acabe de empezar a jugar a fútbol. Como el buen vino, parece que cuanto mayor sea, mejor es. El delantero ha sabido cambiar todas las críticas por los halagos y todos los balones que tiene dentro del área los clava. El olfato goleador es una cosa que no se pierde nunca y, con un equipo que pone los pases donde tocan, Lewandowski es como si fuera un tiburón que oliera sangre dentro del área. Con más goles que partidos esta temporada, el polaco está sorprendiendo incluso al analista más optimista. Ayer se celebró la Gala del Balón de Oro y cuando parecía que no volvería a ninguna más, estamos convencidos de que si continúa así el año que viene podrá disfrutar de lucir el mejor esmoquin para luchar por algún galardón.

Robert Lewandowski y Anna Lewandowska / Instagram

Una persona que seguro que estaría en la gala mirándolo con la misma ilusión que el primer día es Anna Lewandowska, su pareja. Los dos se muestran casi en cada publicación enamorados en las redes sociales.  Siendo los protagonistas de muchos ejercicios para mantener su forma física, a menudo funden a la red presumiendo juntos de abdominales. La pareja del delantero es una joya para la ciudad de Barcelona. Completamente enamorada de sus sitios y de su gente, el otro día ya comentábamos la intención de la polaca de abrir un gimnasio. Lewandowska quiere poner a toda la ciudad en forma y, viendo todas sus historias de Instagram, parece que lo está consiguiendo. Hace casi un mes le daban el Premio de Emprendedora a la IV Gala Woman&Sport. Su trabajo tiene recompensa y es una estrella que brilla con luz propia.

Sin embargo, la sombra de su marido a veces le ha jugado una mala pasada, porque todo lo que está consiguiendo, algunos lo desprecian por el trampolín que puede resultar para ella la figura de Lewandowski. Así lo ha explicado ella en unas declaraciones a Wprost, un periódico polaco. "Hubo un momento en que realmente quería cortarme de las asociaciones financieras con mi marido", la polaca quiere que se valore su trabajo como empresaria y ha aprendido a convivir con los comentarios "Si no fuera por Robert, no hubiera conseguido nada". La empresaria ha querido reconocer que no sería tan famosa si su marido no fuera quien es, pero su trabajo va más allá de él. Anna Lewandowska es más que la pareja de un magnífico jugador del Barça y quien no lo crea así, que diga misa.

Anna Lewandowska / Instagram

Anna Lewandowska y Robert Lewandowski forman una de las parejas más amadas por el conjunto culé. Ahora que el hombre brilla al Barça con sus goles, Anna los grita desde casa y a Montjuïc. Por otra parte, Robert también celebra todos los triunfos y pasos adelante que su mujer da en todo lo que encabeza. En las declaraciones, la polaca ha querido añadir una diferencia principal entre los dos que la ha definido en función de sus sueños: "La gente que me conoce, sabiendo que no puedo quedarme quieta, tengo que actuar. Robert y yo somos totalmente opuestos: él está muy centrado en un objetivo, yo tengo muchos pequeños objetivos". Anna Lewandowska es fantástica, una persona de 10. Ahora entendemos también por qué tiene esta mentalidad en el campo Robert. Sus objetivos son muy grandes y ambiciosos, pero el nuestro es poder verles juntos toda la vida.