Argentina está viviendo unos días convulsos. Uno de los máximos representantes del país sudamericano está en el punto de mira. Y en pleno Mundial de Rusia en marcha. Leo Messi está en el ojo del huracán y no hay mate que calme los ánimos y la opinión pública argentina. Especialmente de sus detractores, que no dudan en cuestionar su vida en pareja y la fuerza del núcleo familiar que ha formado con Antonella Roccuzzo y sus tres hijos Thiago, Mateo y Ciro.
A Messi le están cayendo galletas desde su país, y no precisamente de dulce de leche. Todo ha venido provocado por unos vídeos y unos audios registrados por un personaje que responde al nombre del Tirri, un cantante y compositor, de nombre real Luciano Giugno, miembro fundador del grupo Los fabulosos Cadillacs y primo hermano del empresario y presentador de televisión, Marcelo Hugo Tinelli. A pesar de que las imágenes y lo que se dice corresponden a hace dos años, y sin que nadie sepa exactamente el contexto, muchos medios argentinos han dado gato por liebre y lo han aprovechado para meter cizaña. Se trata de unos mensajes del tal Tirri emplazando a los jugadores de la selección, y amigos suyos, el Kun Agüero y Leo Messi, a que cuando se reencuentren "los esperan muchas cosas lindas".
Estas dos palabras han hecho correr ríos de tinta especulando sobre si se trataría de alguna fiesta donde hubiera chicas de por medio. Conclusión a la que han llegado después de ver la reacción del jugador del City -más atolondrada- y la del azulgrana -más pausada.
El Tirri dice que perdió el móvil y que no sabe por qué ahora han salido a la luz las conversaciones. Pero es un mal momento que parece escogido por alguien para desestabilizar al crack argentino. Si a eso le sumamos que el debut de la selección albiceleste no fue el deseado, a pesar de los ánimos de los hijos de Messi hacia su padre, con un empate contra la debutante Islandia, con Messi fallando un penalti, se ha generado en Argentina un debate nacional sobre cómo afectarán estos vídeos a la concentración de la selección nacional y cómo repercutirá en la vida sentimental de Messi.
Aunque les pese a muchos, Messi y Antonella Roccuzzo continúan tan felices como el primer día, enamorados, acabados de casar hace un año y ajenos a los millares de especulaciones y rumores de separación que han tenido que aguantar año tras año. Los mal pensados incluso quisieron ver un gesto negativo de Roccuzzo hacia su marido al hacerse virales los vídeos, cambiando la foto de su estado de whatsapp, en el que estaba con Messi y los hijos, por una en la que está ella sola con los pequeños. Pero Antonella ha callado bocas de golpe con una publicación en su cuenta de Instagram, donde aparecen los cinco, con un contundente mensaje para navegantes: "Siempre juntos y con vos más que nunca".
Hace poco, en una entrevista, Messi dijo que en Catalunya se encontraba como en casa, y que sus hijos eran catalanes, aunque todo el mundo sabe de la devoción que tiene él por su país. Pero quizás cosas como estas le hacen pensarse un poco si volver más tarde que de pronto a Argentina.