Antonio Canales es uno de los mejores bailaores que hay en España. El andaluz, sin embargo, no sólo tiene arte en sus pies y en sus brazos, haciendo de su profesión un arte. Porque Canales no sólo consigue poner de pie al público con su talento. También es de aquellos artistas que cuando habla, lo hace con una gracia natural y una franqueza que muchos otros tendrían que envidiar.

Antonio Canales (@antonio_canales_oficial)

El bailarín no tiene pelos en la lengua y es uno de aquellos entrevistados que no deja nunca indiferente. Tampoco cuando tiene que hablar de él mismo y de temas espinosos. Y uno de los más polémicos sobre su vida privada tuvo lugar ahora hace nueve veranos. Agosto del 2011, Canales y su novio de aquella época, Juanjo, un camarero, estaban en la playa de Sitges. Allí, el bailaor se puso a practicarle una felación a su pareja. Unas imágenes de su intimidad que resultaron no ser tan íntimas. ¿Por qué? Porque salieron en televisión, en el programa ¿Dónde estás, corazón? que se emitía en Antena 3. ¿Algún paparazzi los cazó? No exactamente. Tal como él ha explicado en Espejo Público, el novio había pactado con un fotógrafo a cambio de 14.000 euros.

El mismo Canales recuerda cuál fue la reacción de su hijo cuando lo vio por la tele en actitud poco habitual:

Canales habla del hijo, y del padre. También ha confesado la sincera y espontánea reacción de su progenitor cuándo estalló su affaire y su cara salió a toda pantalla amorrado al pilón. ¿Qué le dijo su padre? Un consejo que se grabó a fuego: "Mi padre me dijo: chúpasela a quien quieras pero que no te vea medio mundo". Bravo por el padre. Y bravo por Antonio Canales por su sinceridad explicándolo.