El 'caso Vinicius' está siendo sobredimensionado y exagerado por el madridismo con una intención clara. Con la temporada ridícula que ha perpetrado el equipo blanco, ya tienen un tema con que intentar taparla: los seguidores del Valencia que insultaron a Vinicius con expresiones racistas, como llamar mono a un jugador negro. Antonio García Ferreras dedica Al rojo vivo, ¡la semana de las elecciones!, a defender la causa madridista, a acusar a los árbitros literalmente de "sicarios", a asediar candidatos a la alcaldía de Valencia porque a su parecer no son lo bastante duros contra la afición del Valencia y a acusar a Rubiales y los estamentos del fútbol de no proteger a la estrella del Real Madrid. Ferreras fue durante muchos años Jefe de Comunicación a sueldo de Florentino Pérez dentro del club blanco y ni lo disimula. Sigue siendo el portavoz del club ahora desde La Sexta y en su locura ha llegado a acusar de racista a Pep Guardiola. Vídeo:
Para hablar del racismo actual al fútbol español recurren a un vídeo de hace 30 años, mostrando unas imágenes del Camp Nou de 1996, cuando Roberto Carlos acababa de fichar por el Madrid. Muy actual todo. El jugador fue recibido con pancartas racistas en el Camp Nou, ahora sería impensable que las permitieran, y Ferreras, enfermo de madridismo, coloca una respuesta de Guardiola cuando era jugador. Roberto Carlos acusó a toda la afición culé de racista. La redactora de Ferreras, él diría sicaria, sostiene: "Le preguntan a Pep Guardiola por los insultos racistas y lejos de condenarlos dice que ese señor habla mucho y lleva muy poco aquí". Es decir, Guardiola racista. Esta es la porquería que esparce Ferreras, todavía escocido por cómo Guardiola eliminó al Real Madrid, humillándolo.
Guardiola decía que Roberto Carlos llevaba mucho tiempo hablando de la afición azulgrana y no la conocía para hablar tanto. Guardiola aclaraba que no toda la afición del Barça es racista. Una verdad tan incontestable como que hay racistas en todas las aficiones. Y sembradores de odio. Ferreras no ha encontrado imágenes más recientes, de hace una semana cuando la afición del Real Madrid vomitaba insultos homófobos diciendo que Guardiola era homosexual y que estaba demasiado delgado por una supuesta enfermedad. Ferreras cree que es mejor recordar a Guardiola hace 30 años antes que Guardiola insultado gravemente por el madridismo hace 10 días. Ferreras es tan chapucero que no engaña a nadie y la red dice basta:
Vinicius es de largo el jugador más detestado de la Liga por las aficiones y los jugadores. Y no es por su color de piel. Cada semana hace el mismo ridículo, señalarse el escudo, enviar a segunda a los equipos pequeños, enfrentarse con las gradas o ser expulsado. Y el madridismo está intentando tapar este escándalo con los espectadores racistas. Y las dos cosas son verdad y las dos se tienen que denunciar: hay espectadores racistas que hay que echar del campo, y hay un jugador provocador, mal compañero y anti-deportivo que se llama Vinicius. Una cosa no justifica la otra. Coexisten. Y también hay una tercera verdad, Ferreras es, solo, la voz desesperada de un madridismo que acaba de fracasar.