Nuevos problemas para Alberto de Mónaco. Tras los rumores de crisis en su matrimonio, Alexandre Grimaldi-Coste, un joven de 18 años, reaparece. El chico nació años antes que su padre contrajese matrimonio con Charlène Wittstock. Su madre, Nicole Coste, tiene otros dos hijos con distintos padres, con los que reside habitualmente en Londres, aunque también se les puede ver por la zona de Mónaco, MonteCarlo o la Costa Azul.
Finalmente, Alberto II reconoció a Alexandre como su hijo. El príncipe llegó a un acuerdo con Nicole Coste. Les pidió que madre e hijo viviesen alejados de Mónaco, no obstante, el hijo siempre tendría sitio en la corte de su padre, y por supuesto se haría cargo de su educación. Le pagó los colegios más elitistas. Sin embargo, Nicole ha roto el pacto porque aparece en el principado con una irregularidad que complica mucho la vida de Alberto para ocultarles. Cada vez que Charlene se entera de la presencia de Nicole en Monte Carlo, se tensa aún más su relación con Alberto.
Nicole Coste rompe el acuerdo
Alberto II también tiene problemas con Charlene y los intenta tapar. La princesa ha regresado de Suiza, donde tiene su residencia irregular, para cumplir con sus obligaciones en el principado. El príncipe quiere hacer creer que todo es perfecto, pero no es así. Nicole Coste ha venido a poner patas arriba la vida del padre de su hijo.
Fue ella misma quien publicó una fotografía junto a su hijo Alexandre en un famoso restaurante muy concurrido de la Costa Azul. Se puede ver a una madre y a un hijo muy sonrientes con miradas cómplices, durante los primeros días de unas vacaciones.
Fuentes cercanas a Palacio, cuentan que esta imagen ha sido una provocación en toda regla, sin importancia mayor, pero “irritante”. Alexandre Grimaldi-Coste es un hijo reconocido, y, como tal, figura en la línea directa de los posibles sucesores. La sucesión de un hijo negro, en Mónaco, quizá no sea muy realista ni inmediata. Familiares cercanos a Alberto II le piden discreción.