Tamara Falcó e Íñigo Onieva ya son marido y mujer. Deducimos que la parejita feliz deben estar agotados de tanto como duró su boda, con preboda, boda, postboda, requeteboda y nosequechorradasmasdeboda. Por lo menos, nosotros lo estamos. Una boda que no se acababa nunca, un enlace agotador para el resto de la humanidad, lleno de tonterías y condiciones absurdas a los invitados sobre dejar su móvil en unas taquillas para no hacer pública la millonaria exclusiva. Un paripé grotesco e interminable, donde hubo de todo, con más de 400 invitados, ausencias destacadas como la de Jordi Cruz, un incendio, malas caras, un vestido de noche de bodas que parecía de una monja de clausura y lo que ustedes quieran.
Pero la boda ya se ha acabado. Ahora la hija de Isabel Preysler y su maridito ya están de luna de miel. Pero si se pensaban que la boda no se acababa nunca, prepárense porque el viajecito de la parejita es de traca. Se pasarán más tiempo arriba y abajo que preparando la boda. Es lo que tiene estar forrados y además, que una revista como ¡Hola! te pague una morterada para poder mostrar todas las imágenes en un número exclusivo que se agotó, como era previsible.
Tamara e Íñigo ya están en la otra punta del planeta para empezar su primer viaje de casados. Ella, en chándal, para ir cómoda, ya que les esperaban horas de vuelo para ir a Australia. Pero la pareja ha sorprendido, porque primero han hecho una paradita en Sudáfrica, en Johannesburgo. El programa Aruser@s de Alfonso Arús lo explicaba por boca de su hija Tatiana: "Fueron 20 horas de vuelo, en total 24 horas, porque tuvo que hacer escala en Dubái. No sabemos cuál va a ser exactamente el recorrido, pero si es cierta la información que circula serían 80 días"... Repetimos: 80 días. Como si fueran Willy Fog y Rigodón. De traca. A lo grande. No se privan de nada. Pero eso no es todo, como recuerda la colaboradora del matinal de La Sexta, la pareja "tiene una cita el 26 de agosto por la boda de una amiga de Tamara Falcó". ¿Y qué harán? Volver a Madrid por este motivo, pero un visto y no visto, ya que una vez acabe, volverán con su gira Tamara e Íñigo Just Married Tour, "que duraría tres meses"... Eso sin contar con que en abril ya se marcharon a Indonesia a no pegar sello a un resort de lujo.
Al oírlo, Alfonso Arús salta escandalizado: "A mí las cosas no me cuadran. Considerando que Íñigo Onieva ha despedido su soltería en tres viajes, ¿ahora puede estar tres meses sin dar palo al agua?"... para, a continuación, hacerse la pregunta en voz alta que todos nos estábamos haciendo: "Pero, ¿de qué vive este hombre?"... Unos dirán que del cuento, otros que de los papis, otros que de las exclusivas, y algunos dirán que paga la suegra. Sea como sea, el presentador catalán ha acertado en la diana. Onieva, un jeta de la cabeza a los pies con la mano rota. Bravo por Alfonspo por decir en voz alta lo que piensa media España y parte de la otra.