El nuevo gobierno Sánchez debuta en TV. Quien ha abierto el fuego ha sido el más veterano del Consejo de Ministros: Josep Borrell. Como Margallo, es septuagenario y a pesar de llevar Exteriores opinará de Catalunya como si fuera vicepresidente. Margallo tenía fama de hacer buenas audiencias pero Borrell se ha quedado en un 7% en El objetivo de Ana Pastor. Se enfrentaba a una noche muy bien atada en TV3: el 30 minuts sobre Hackers el 1-O fue el programa más visto del día con un fabuloso 21,3%. Todos los documentales de TV3 sobre el referéndum arrasan de audiencia, y si se trata de los piratas que trataron de sabotear la votación, 606 mil espectadores se atraparon, como los mejores tiempos del Trenta.
"No lo hice por|para temas independentistas sino por|para temas de neutralidad en la red"
— 30 minutos (@30minuts) 10 de junio de 2018
Hoy "Hackers 1-O" #30minutsTV3
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TV3 quiso mimar el estreno de la primera de las 3 entrevistas que Ricard Ustrell ha hecho para Catalunya Ràdio y que se emitirán también por TV3: Quatre gats no tuvo ni un descanso para publicidad, un trato preferente que sólo se reserva a los estrenos. La transición entre el 30 minuts y Quatre gats fue la clave. Los espectadores que querían informarse tenían que mirar todo como un continuo: así atacaban el referéndum y así Salmond hizo uno en Escocia. Ustrell interesó menos que el 30 minuts pero hizo un buen 18,5%
El sábado el FAQs sin Ustrell ni Borell con Rosel hizo un gran 21,3% con Guardiola pero hizo menos espectadores que el amistoso Túnez-España (20,8%). Con el Mundial, parece que el liderazgo de TV3 se acabará. Un amistoso penoso con apenas un gol hizo 445 mil espectadores, y Rosel se conformó con 400 mil. Más sorprendente es que el viernes el programa más visto fuera Los Gipsy Kings y su 9%, sólo superado por la película 100 metros. Una tienda de ropa brilli brilli en la calle Trafalgar de Barcelona que reunió a las Salazar. Si todo eso les suena a chino es que no han caído en las garras del placer culpable de mirar este formato de éxito.
Pero lo más sorprendente del fin de semana es que TVE haga un debate en catalán, Ara i aquí, con el pater Carlos Fuentes y el título sea ¿Quien no trabaja es porque no quiere? Los millones de parados, señalados como zánganos en la TV pública. La nueva ministra de Trabajo ya sabe qué programas empezará a cargarse de la TVE del PP. No sólo tiembla Cárdenas.