Cuando hablamos del Barça femenino, a menudo las protagonistas de sus historias son tres: Alexia Putellas, Aitana Bonmatí y Mapi León. Cracks, líderes, ídolas. Y tanto. Pero la plantilla culé es mucho más extensa y llena de calidad, de futbolística y de humana. No se entendería el Barça sin ellas. O cuando menos, costaría bastante hacerse a la idea. Es el caso de Ana Maria Crnogorcevic, la suiza-croata de 32 años que acaba de anunciar que se va. Un adiós doloroso y con regusto amargo: ella no quería irse. De hecho no se le pasó jamás por la cabeza. Pero los acontecimientos de las últimas semanas, tan pronto como volvió del mundial de Australia y Nueva Zelanda, han provocado su salida en dirección a Madrid, enrolándose en las filas del Atlético. Una enorme pérdida.

El palmarés de Ana Maria es impresionante: desde su llegada, hace 3 años y medio, ha levantado 2 Champions League, 4 Ligas, 3 Copas y 3 Supercopas. Jugadora de equipo muy polivalente, ha marcado 9 goles en 65 partidos oficiales, pero sobre todo ha colaborado y de qué manera en la racha triunfal del club. Fuera de los terrenos de juego también ha arrasado, sus compañeras la querían y todo el país se fijaba en ella. ¿Por qué? Entre otras cosas, por representar el modelo de integración y respeto que falta en España. Se ha esforzado con la lengua, el catalán. Lo ha estudiado, lo ha practicado, lo ha defendido. Ha celebrado, reído y llorado en nuestro idioma. Esto enamoraba en Catalunya, de la misma manera que irritaba los españolazos, como con aquella respuesta a una reportera de Barça TV que le preguntaba en castellano. El típico tic local cuando te diriges a una persona extranjera, ya saben. Ella, en tono en broma, le espetó a la periodista: "No te entiendo en castellano". Como Quique Setién hace unos días, pero a la inversa. Y sin la mala leche que desprendía el cántabro. Nada que ver.

Ana Maria Crnogorcevic / Instagram

La carta de Ana Maria Crnogorcevic para decir adiós, emoción y cierta amargura

Pues bien, Ana Mari se ha ido y ya está en Madrid, es oficial. Una mudanza que ha despertado un torrente de emociones. Esta es la carta de despeddia de una deportista identificada al 100% con el ADN Barça: "No tengo palabras. Ha sido un honor vestir esta camiseta, representar los colores del club y llevarlo a lo más alto en Europa! Barcelona era mi casa y lo sentí con todo mi corazón! Llegar a un sitio sin entender ni una palabra no era fácil, pero gracias al equipo, a mis amigas y a vosotros, Barcelona se convirtió en un lugar que me hacía muy feliz y querida. Gracias al Club por estos años y todos estos momentos que hemos vivido! Y a la afición solo puedo decir que siempre os llevo en mi corazón, gracias por el apoyo y el amor… me sentí muy afortunada". La espina: "Volví con muchas ganas y por eso aún duele más y estoy muy decepcionada cuando me enteré que ya de repente no sé contaba conmigo. Espero que entendáis que así no me puedo quedar aquí, que me perdoneis esto". Y el final: "Us estimo". 

Compañeras y afición, conmovidas

No hay que decir que no solo no hay nada que perdonar, es que todo lo que ha dado al club, al equipo y a los fans lo está recibiendo de vuelta multiplicado por|para mil. Haciendo un repaso por redes sociales, la tónica es siempre la misma: honor y gloria a Ana Maria, un diamante. Las jugadoras azulgranas le dedican un corazón muy representativo, mientras los aficionados y aficionadas se desahogan más: "No lo olvidaremos nunca", "solo podemos estar agradecidas de haber podido disfrutarte de azulgrana", "el Barça siempre será tu casa", "una di noi siempre", "tienes todos los valores que me hicieron ser de este club", "has calado muy adentro"... y así todo. Hay un clamor: exigen un despedida a la altura de su legado. Se lo merecería.

Ana Maria Crnogorcevic / Instagram

Se va una de las grandes, pero lo que hs dejado vivirá para siempre. Suerte y aciertos, crack.