El planeta fútbol parece tener la vista puesta única y exclusivamente en el mundial de Catar, pero lejos de la polémica competición masculina también hay vida. Mucha, de hecho. Las chicas del Barça femenino, por ejemplo, que siguen mandando con paso firme en la liga. El fin de semana se cierra con una nueva victoria, quizás la más complicada de la temporada: 2 a 1 contra la Real Sociedad con un gol de la británica Lucy Bronze en las postrimerías de los 90 minutos, completando la remontada culé en el Estadi Johann Cruyff. Los 3 puntos tienen un regusto todavía más dulce en estas circunstancias, y sirven para coronar una cita en la que Aitana Bonmatí y Mapi León fueron homenajeadas por sus 200 partidos vistiendo la azulgrana.
Los aficionados reventaron de alegría con el remate de cabeza de Lucy como pocas veces durante esta temporada. Una felicidad que hizo que muchos se quedaran a esperar la salida de las jugadoras para animarlas y pedirles fotos y autógrafos. Una costumbre habitual, sí, pero que el sábado se multiplicó con más fans que de costumbre. Entre ellas había una compañera de El Nacional.cat, y que con su cámara inmortalizó el goteo de cracks abandonando la ciudad deportiva en sus vehículos particulares. La comparación con los compañeros del masculino es notable. Este material ofrece sorpresas: algunos de los coches hablan de la personalidad de sus propietarias, otros son curiosos. Por ejemplo: una de las líderes de la defensa, la fantástica Irene Paredes (de baja por gastroenteritis), tiene un utilitario muy modesto y muy trallado, con cerca de 20 años de vida.
Irene abandonaba las instalaciones acompañada de su pareja Lucía en un vehículo chiquitín de una marca japonesa. Debe tener un montón de kilómetros encima, y lo que resulta todavía más enternecedor: lleva la sillita de su bebé de un año y pico de vida. Seguro que muchos de nuestros lectores se sienten identificados con ella. Y bien, también habla de la modestia de los sueldos del femenino, a pesar de los avances conseguidos en los últimos años. Piensen que Alexia Putellas, número 1 del mundo, gana según algunas fuentes 150.000€ al año. Han leído bien, sí. A la doble Pelota de Oro también la captaron en la salida, conduciendo un 'pepino' de la marca patrocinadora del club. El mismo vehículo de la estimable Ana Crnogòrcevic, acompañada como copiloto por la lesionada Caroline Graham Hansen. La goleadora Lucy Bronze se marchaba con la también inglesa Keira Walsh. Son dos recién llegadas a Catalunya y hacen mucha vida juntas. El coche de Bronze es nuevo y de estilo deportivo, como vieron los seguidores que compartieron un rato con ellas.
En pareja también se iba Sandra Paños. La portera y su pareja conducían un SUV con pocos meses de vida, también de estilo familiar. Similar, por ejemplo, al de Mariona o Jana Fernández, sin lujos pero con mucho confort. Curioso es el caso de la sueca Fridolina Rolfö. Lleva un año y medio en el Barça, pero su coche tiene 5. Por lo tanto entendemos que es de segunda mano, y ella no lo conduce: su compañero hace de chófer. De la gran Mapi León no podemos decir gran cosa del vehículo, pero sí tres detalles: llevaba la camiseta conmemorativa enmarcada en la parte de detrás, no iba acompañada por su pareja Engen y no le hizo demasiada gracia que le tocaran el coche. El repaso lo acabamos con Laia Codina. La defensa sorprendía con una furgoneta pick-up, muy americana, imponente, enorme. Qué ganas de saber que cargará en la parte posterior, la verdad.
Seguiremos atentos para curiosear al resto de la plantilla. Pero vaya, que con esta selección nos podemos hacer una idea del estilo de vida de las jugadoras fuera del terreno de juego. ¡Gas a fondo!