Una semana ha pasado desde el último enfrentamiento, en pleno directo, que Belén Esteban y Jorge Javier Vázquez protagonizaron en Sálvame. Si la última vez fue por culpa de la pandemia del coronavirus, esta vez ha sido por unas fotos. El de Badalona enseñó a sus compañeros unas fotografías de la Esteban, algo que no hizo nada de gracia a la colaboradora. Por este motivo, la de San Blas respondió al catalán, en forma de amenaza, diciendo que ella también tiene muchas fotografías suyas. Una respuesta que desató la guerra. Tanto, que a día de hoy, por el momento, no se hablan. Tampoco han coincidido en los platós de televisión. Es fuerte.
Un delicado momento para Belén Esteban, con el que según se comenta se podría plantear dejar la televisión y centrarse en sus negocios fuera de la pequeña pantalla, como por ejemplo su línea de joyas. Aunque, por delicado, el momento que ha vivido este pasado fin de semana. La de Sálvame, el domingo 21 de febrero, se fue con su marido Miguel a comer a un restaurante de Madrid. Y a su salida tuvo que vivir un episodio que no se esperaba. Tanto le impactó, que Belén Esteban no dudó en compartirlo con sus seguidores en sus historias de Instagram. Es este:
"Todo el día así. Me parece muy bien, pero lo que no tolero es que el más bajito me insulte y me provoque". Este es el escrito, en color rosa, su favorito, que se puede leer en las redes sociales de la colaboradora de Mediaset. Una publicación, muy polémica, en la que Belén Esteban descubre la identidad de los reporteros que hacen su trabajo en la calle. Personas anónimas, que ahora han dejado de serlo gracias a la fotografía que la de Sálvame ha compartido. Ya lo ven, últimamente la cosa va de fotos y Belén Esteban podría salir mal parada. ¿Cómo terminará la polémica?