No son días de vino y rosas en el Partido Popular. La ultraderecha de VOX les está pasando por la derecha (evidentemente), y les ha birlado el liderazgo en Catalunya. Un presagio, dicen, de lo que pasaría en todo el estado si mañana hubiera elecciones generales. Han caído las máscaras, y buena parte de los que votaban a Casado, Rajoy o Aznar se han pasado a las filas de Abascal, sin complejos para actuar como fachas. Si a eso le añadimos el juicio a Luis Bárcenas y la montaña de porquería que les está cayendo encima, con supuesta mudanza de la calle Gènova incluida, se entiende que en la zona 'noble' de la formación todo el mundo mire al compañero con desconfianza. Mal rollito. La pugna por el liderazgo popular parece volver a abrirse, con un nombre que despunta: el del alcalde de Madrid, José Luis Martínez Almeida, recientemente nombrado como portavoz nacional del partido. El concejal le está comiendo la tostada a la velocidad de la luz. Y sus seguidores le hacen campaña.
Una bien potente le ha llegado gracias a Telecinco: uno de sus personajes más famosos se ha posicionado en 'Sálvame'. Belén Esteban le ha cogido el gusto a hacer de comentarista política. No se puede decir que salga bien parada cada vez que abre la boca, sí, pero es tozuda. Aprovechando que Jorge Javier Vázquez no estaba, volvió a insistir. Un día hace de altavoz contra Moncloa, otro promonarquía y, la última muestra, meterse de lleno en la lucha por el poder en el PP. Todo a raíz del nuevo programa de María Teresa Campos, un espacio de entrevistas grabado en un camión transparente que recorre Madrid. La primera invitada, de traca: Isabel Díaz Ayuso. Era muy necesario, claro. Esta es la nueva arma de Mediaset para luchar contra 'Pasapalabra', pero tiene pinta que muchos pasarán, pero de sufrir a IDA desde el sofá de casa.
El caso es que a 'La Esteban' eso de la política la seduce mucho más que hablar de la Pantoja o de María José Campanario. Se ve capaz, dice, de hacer buenas entrevistas a políticos. La cosa tiene gracia y una lectura pelín sesgada. "A Pedro Sánchez le preguntaría en qué se ha equivocado. A Pablo Iglesias, por qué ha cambiado de estatus y se ha ido de Vallecas. Y a Almeida, si sería candidato del PP a la presidencia del Gobierno". Vaya. El alcalde de Madrid dando saltitos en su despacho, mientras que a Pablo Casado le pitan los oídos. Porque "para mi, es mejor Almeida que Casado, lo siento mucho". La división del PP, carne del chismorreo. Todo está perdido, Pablito.
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Que tampoco se confíe demasiado Almeida. Esteban ha dado más volantazos a lo largo de los años que Toni Cantó. Del amor al odio hay un paso, ¿"me-en-tien-desss"?