La periodista nacida en Sevilla, Mila Ximénez, el pasado 23 de junio, tras un año de larga lucha, perdió la vida tras no conseguir superar el cáncer de pulmón que le detectaron pocos antes de iniciar el verano del 2020. Un fallecimiento que ha dejado a todos sus amigos y compañeros devastados, quienes la recuerdan cada día que pasa.
Prueba de ello son Kiko Herández y Belén Esteban, dos de sus amigos más íntimos, quienes se han quedado muy tocados con la pérdida de la colaboradora de Sálvame. Una amistad de la que los dos han vuelto a hacer gala. Lo han hecho explicando en directo a la audiencia del programa la herencia que les dejó la periodista del corazón antes de perder la vida. Una herencia que Belén Esteban, sin poder contener las lágrimas y muy triste por todo lo ocurrido, no ha dudado en mostrar a los espectadores ante las cámaras.
"Es muy emocionante lo que me ha pasado durante esta publicidad, y para Belén Esteban también. Ha venido un amigo nuestro, de las mudanzas, que le hizo la mudanza a Mila Ximénez, y nos dejó unos detalles para Belén y para mi que nos acaba de traer", empezó diciendo Kiko Hernández, durante la tarde del martes 13 de julio.
"Solamente quiero decir que ya está con nosotros. A mi me ha dejado un cuadro, y lo voy a colgar al lado de mi cama y ya te tengo conmigo otra vez", añadió el colaborador de Sálvame, desvelando así el regalo que le ha dejado Ximénez antes de perder la vida con 69 años. Foto del momento:
"¿A ti qué te ha dejado?", le preguntaba Jorge Javier a su compañera. La de San Blas, con los ojos rojos de llorar, decía: "un pañuelo suyo". A continuación añadió: "Ya lo sabía, lo hablé con la familia y quiero agradecer, por supuesto, a Alba, Concha, Manolo y Nani".
Acto seguido, y tras ser animada por el director del programa, David Valldeperas, y Jorge Javier Vázquez, Belén Esteban fue a buscar el pañuelo que su íntima amiga le ha dejado en herencia y lo mostó a la cámara para que todo el mundo pudiera verlo en directo. Es este:
Una tarde complicada, recordando la que fue su gran amiga, que Jorge Javier aprovechó para también sincerarse y decir que no hay día que no piensen en Mila, puesto que es "una de las mejores cosas que me ha pasado en la vida". Un fallecimiento, confesó el catalán, del que ahora es consciente pero que lo será mucho más aún cuando en agosto se ausente de la televisión para disfrutar de sus vacaciones de verano. Y es que él y Mila, cada año, pasaban unos días juntos. Una tradición que el cáncer se ha llevado por delante. Aunque siempre le quedarán los recuerdos y los buenos momentos vividos, que seguro no son pocos.