Bertín Osborne es un hombre muy español. A patriota no le gana nadie. También es un hombre de firmes convicciones monárquicas, juancarlista para más señas. Su relación es de servilismo, admiración y adulación, y la exhibe siempre que puede. Ya sea caminando por la calle con una mascarilla con la inscripción "V.E.R.D.E" ('Viva el rey de España'),en programas de televisión con Nuria Roca o zampándose una paella muy polémica con Arévalo, la Infanta Elena y el propio Juan Carlos, Norberto no pierde nunca la oportunidad de dejarnos bien clara su proximidad al huido y a la institución. Pero hay más elementos que lo demuestran, y bien jugosos.
No, no estamos hablando de lo que podría ser más obvio: que ambos son muy onocidos por sus romances, relaciones matrimoniales y no matrimoniales. La lista de conquistas de esta pareja es excepcional. El motivo que todavía los acerca más es su curiosa relación con el dinero y las obligaciones con el erario público. Dicho de otra manera: que si pueden y podían zafarse de pagar impuestos a su amadísimo país, pues mira, adelante con los faroles. A los dos los han pillado 'con el carrito del helado' y, cosas del destino, los dos parece que saldrán indemnes. Ahora bien, lo que no han podido evitar es que todo el mundo sepa de qué pasta están hechos. Pasta, curiosa palabra.
Según ha publicado 'El Confidencial', Bertín es español a tiempo parcial. Si es para beber vino, comer jamón del bellota o hacer proselitismo de la derecha, es más patriota que la bandera o la siesta. Si toca pagar a Hacienda, ¡chas!, deja de ser 'mucho español' y fija su residencia en Luxemburgo. Y no, no es que Osborne tenga una especial relación con aquel pequeño país que, oh sorpresa, es un paraíso fiscal. Vaaaaya. También tiene predilección por otro país bien conocido por Juan Carlos de Borbón, Panamá. Precioso lugar de Centroamérica que, casualidades de la vida, también es un paraíso fiscal, y el lugar donde el emérito estableció sociedades pantalla. Osborne lo emuló creando un entramado financiero para no tener que pagar impuestos ni deudas con la Agencia Tributaria.
En declaraciones al diario que publica la información, Bertín está muy triste y arrepentido. "Ese fue el mayor error de mi vida, hace más de 20 años: fiarme de un asesor fiscal mientras yo vivía Estados Unidos. Ya pagué por aquel error más de cinco millones de euros y fue juzgado por ello. Espero no tener que pasar por un segundo juicio 20 años después". Estamos a punto de llorar de la pena que nos da, pero tranquilos, que aunque la Audiencia Nacional tenga los papeles que lo demuestran, como la cosa ha prescrito podrá continuar con su vida normal. Ahora bien, de la 'pena del Telediario', o en este caso de la prensa digital y los comentarios en redes no se salva. Y una de las reflexiones más fulminantes es la de Pilar Rahola, impecable: "Es lo bonito de estos grandes patriotas españoles. Como el emérito. Aman tanto a España que los dineros los tienen en Panamá".
'Que viva España', Bertín, pero sólo si sale gratis, ¿verdad? Ahora venga, a seguir de promoción por todas las teles haciéndose el gran artista y mejor patriota.