Es oficial: Bertín Osborne está protagonizando el culebrón más vergonzante del verano. Tenemos un nuevo capítulo, después de que las redes sociales recuperaran una entrevista del año 1985 en TVE donde reconocía haber pegado a una mujer. El de Jerez decía "no creo que jamás hubiera tenido derecho a hacerlo y me arrepiento muchísimo, pero sí, lo he hecho alguna vez". Una confesión que le ha hecho mucho daño y que ha decidido contestar con un nuevo vídeo vía Twitter. Norberto (su nombre real) será presentador de televisión, pero está claro que el audiovisual no es su fuerte. Cada vez que graba, comienza un nuevo incendio. El último al asegurar muy enojado que la mujer a la que pegó era su hija Claudia, cuando tenía 5 o 6 años "por una rabieta descomunal". ¿Todo claro? No corras, Bertín, que las mentiras "tienen las patas muy cortas".
Muchos espectadores de la grabación exculpatoria del cantante de rancheras no se creen sus palabras. Sobre todo por un detalle imposible de pasar por alto. Si su hija Claudia nació en el año 1989 y la entrevista se registró en el 85, ¿cómo es posible que le pegara por "una rabieta descomunal" de la niña con 5 o 6 años? No es ningún juicio de valor. Son sencillas matemáticas. Hagan números. Su "azote de padre que no me hizo sentir muy bien ni muy orgulloso", ¿fue un castigo en diferido? ¿Es quizás la reencarnación de Benjamin Button y en vez de envejecer, él va hacia atrás en el tiempo? "No sé, Bertín, parece falso".
"Es un tema que he hablado con ella muchas veces, y si queréis podéis preguntarle". El cantante se equivoca: Nadie pone en duda el episodio con su hija, sólo las fechas. Y si el calendario no cuadra, la conclusión es evidente: Seguimos sin saber quién sufrió su "mano larga". Las excusas de Osborne le hunden una vez más, aunque por lo que va demostrando día tras día, todavía puede caer más bajo. Seguro que tendremos nuevos episodios del lamentable serial.