El humorista nacido en Cardona, Berto Romero, ha usado sus redes sociales, cuenta de Instagram, para denunciar públicamente el desagradable episodio que ha vivido en el tren. Una situación incómoda, y que molestaría a muchos, que ha compartido con sus más de 576.000 seguidores. Todo ello acompañado de una explicita foto con la que no se deja lugar a la imaginación.
Muchas son las personas que cuando viajan en transporte público, especialmente viajes largos, se ponen de lo más cómodos, como si estuvieran en casa, sin tener respeto por los demás. Zapatos fuera, pies encima de los asientos o brazos abiertos hasta decir basta ocupando el espacio de la persona que viaja al lado. Situaciones variopintas, que se suman a la que Romero ha denunciado. El catalán ha viajado en tren pero se ha encontrado con un gran inconveniente: visibilidad reducida. Durante las horas que ha durado el trayecto, Berto solamente ha podido ver una cosa: el sobaco de una persona desconocida que se sentaba enfrente suyo. Esperemos, por lo menos, que oliera bien. Hablamos de esto:
"Adiós sobaca del asiento delantero. Tú me acompañaste todo el viaje. Me llenaste los ojos de lágrimas", escribe el amigo de Andreu Buenafuente. Un mensaje breve, intenso, directo y cargado de sentido del humor, que acompaña con el emoticono de un corazón rojo y dos manos diciendo adiós. Ya lo dicen: no viajamos para cambiar de lugar, sino de ideas. Seguro que la próxima vez que Berto se siente detrás de un sobaco desconocido se lo piensa dos veces. O no.