La cantante catalana Beth Rodergas ha pasado del imaginario colectivo español al vertedero del odio anticatalán. De representar a España en Eurovisión en 2003 a ser una "catalana de mierda" en 2019. De ser una de las concursantes más amadas por el público de Operación Triunfo a hacer "bomitar" (sic) a los juiciosos ultras unionistas. Su pecado mortal, celebrar la Diada Nacional de Catalunya recordando a aquellos que hace casi dos años que no la pueden disfrutar en libertad. La de Suria colgaba una sencilla pero contundente fotografía durante el Onze de Setembre que resumía el sentimiento de todo un pueblo. Al menos, de un pueblo con dignidad. "Libertad presos políticos". Lisa y llanamente, sin artificios.

El escozor provocado por la manifestación pública de la cantante entre el españolismo más rancio, exaltado e iletrado fue instantáneo. La maquinaria troll se puso en marcha para descalificarla, y quizás por eso decidió eliminar los comentarios relativos a la imagen. No es de extrañar, después de comprobar uno de los mensajes privados que tuvo que recibir (mejor dicho, que sufrir) y que ha sido compartido vía stories. Aparte del mencionado "bomito (sic) contigo catalana de mierda" (adornado con unos emoticonos al más puro estilo Alberr Rivera), la simpática y tolerante usuaria airada por el clamor de libertad de los presos políticos catalanes añadía perlas como "debería darte vergüenza presentarte a concursos españoles por hacerte famosilla" o el todavía más infantil "te imaginas un barsa badalona". Una joya.

Acoso Beth Diada @bethrodergas

Beth Rodergas cantante @bethrodergas

La criatura acababa su redacción del primer día de escuela con un "qué cortitos sois". Sobran los comentarios. Al igual que la mezcla de medicamentos y maquinaria pesada, la combinación de incultura, intolerancia, Catalunya i el teléfono móvil tendría que estar desaconsejada por la Organización Mundial de la Salud. Al menos, de la salud mental.