La diva número 1 en el mundo, con permiso de una cada vez menos reconocible Madonna, es Beyoncé. Estaba anunciado que visitaría Barcelona el fin de semana del 19 y 20 de enero pero no hay una sola fotografía de la cantante. Algunos medios han dado por buena una foto de Beyoncé en el restaurante Botafumeiro de la calle Gran de Gràcia cenando paella. Una pifia descomunal: en realidad la foto es de agosto de 2016, cuando la cantante actuó en el Estadio Olímpico. Entonces iba rubia y ahora morena:
La primera foto es de hace casi 3 años y la segunda foto es actual, en un aeropuerto de Bombay hace un mes cuando actuó a la boda de la hija del hombre más rico de la india. Si la heredera de Zara tiene a Coldplay, la rica heredera india tiene a Beyoncé. Queda claro que son imágenes con 3 años de diferencia. Desmentido que Beyoncé volviera a cenar paella con ketchup, como han titulado algunos medios, lo único cierto es que llegó sola, sin el marido ni los hijos en avión privado y se instaló en el Hotel Arts. Rodeada de guardaespaldas el secretismo es tal que ni fuentes del mundo publicitario barcelonés consultadas por En Blau saben qué marca anunciará la diva que pueda pagarle el caché. Algunos apuestan por Pepsi.
Paella con Pepsi y tomate de bote. Una dieta imposible para la más grande entre las grandes. Si vive y trabaja en Catalunya podemos decir que Beyoncé ha sido durante dos días catalana. ¿Qué pensará del procés?