El multimillonario estadounidense Jeffrey Epstein se suicidó la semana pasada en una prisión federal de Nueva York. Estaba pendiente de una condena de 45 años de cárcel, acusado de explotar sexualmente a un montón de chicas, entre las que había menores de edad. Pero antes de conocer la sentencia, prefirió quitarse la vida. Entre los amigos y conocidos de Epstein, personalidades tan relevantes como el príncipe Andrés del Reino Unido o Donald Trump. Y otro presidente de los Estados Unidos: Bill Clinton.
Ahora que ha fallecido, en su mansión de Manhattan han hecho un descubrimiento: Jeffrey Epstein tenía un cuadro de Bill Clinton vestido de mujer. El expresidente, sentado en una silla del despacho oval. Lleva puesto un vestido azul bien escotado y unos zapatos rojos de tacón. Un 'look' que recuerda mucho a la manera de vestir de Monica Lewinsky cuando era becaria en la Casa Blanca.
El retrato, titulado 'Parsing Bill', es obra de la artista australiana Petrina Ryan-Kleid. Nadie sabe exactamente qué hacía esta imagen colgando en la pared de casa de un conocido pedófilo. Pero tal y como indican algunos medios norteamericanos, hace recordar a todo el mundo que a Epstein y Clinton los unía una fuerte amistad. Incluso habían volado juntos en el 'Lolita Express', el avión privado del multimillonario muerto en prisión.