Albert Boadella sigue tan polémico como siempre. El autoproclamado presidente de Tabarnia ha concedido una entrevista a La Sexta Noche, abriendo las puertas de su casa de Girona a Iñaki López. Durante la conversación ha criticado, una vez más, la situación política a Catalunya. Pero no sólo eso, sino que también ha metido el dedo en la llaga dejando verde la gestión de TV3.

Todo empezaba, por eso, con un concepto que ha repetido en varias ocasiones: "Los independentistas son cursis". Afirma que cada gesto de los soberanistas le refuerza esta idea, destacando la iniciativa más reciente de colocar cruces amarillas en las playas: "Es una cosa de muy mal gusto. Tienen una cursilería muy grande, que si los lacitos amarillos, que si... Su razonamiento sobre Catalunya es cursi y terrorífico. Estamos cerca de un problema. Puede ser que se calme en algún momento, pero veo muy difícil que no pasen situaciones complicadas y violentas".

¿Cómo califica a Catalunya, por cierto? De un territorio "partido", volviendo a la idea de la mayoría no independentista: "Más de la mitad de la población no está a favor de la independencia, pero son más silenciosos. Son a los nacionalistas lo que tienen la voz y están provocando estas situaciones que pueden acabar muy mal".

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Pero como decíamos, uno de los momentos más comentados llegó con su ataque a TV3. De nuevo la tachó de "golpista", asegurando que no tiene solución: "No tiene porque ha sido hecha por eso. No es una televisión pública en el sentido que entenderíamos qué es una televisión pública con cierta neutralidad. TV3 ha sido siempre el arma del gobierno nacionalista catalán".

El presentador quiso que comparara la situación de la televisión catalana con la de TVE, pero Boadella quiso dejar claro que son dos casos muy diferentes: "TVE simplemente es mala y está mal hecha. Pero TV3 no es sólo partidista, también es golpista. No la tenemos sintonizada porque no necesitamos ser adoctrinados", añadió.

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Un discurso que repite y repite, indignando los soberanistas pero haciendo las delicias de los seguidores de Tabarnia.