Ramon Madaula es uno de los popes del teatro y la TV en Catalunya. A los 61 años ya no hace del guapo de la serie pero escribe y dirige teatro. Hizo hace poco una obra con Raquel Sans, la presentadora y directora del TN Mediodía, sobre Buffalo Bill y ahora vuelve a dirigir El tigre en el Espacio Texas de Barcelona con Mercè Martínez y David Olivares, dos de los actores más populares del país gracias en buena parte a TV3 en La Riera o Polònia. Madaula también se ha popularizado para ser el quiosquero de Estacio de enlace y el marido de Emma Vilarasau en Ventdelplà (no lo que la pegaba, que era Jordi Boixaderas sino el otro) Son dos de las series nocturnas más míticas de los 40 años de cadena. Madaula es hombre de teatro y con tanta carrera se permite pontificar sobre un mal que diagnostica en Barcelona: hay demasiadas obras para tan pocas salas. Le acaba de pasar con El Tigre que solo estará en junio.

Ramon Madaula TV3
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El tigre

La obra reflexiona en formato comedia sobre el negocio que genera la búsqueda de la felicidad. Madaula ha promocionado el texto en Radio Estel y le han preguntado por el estado actual del teatro catalán. Podría haber respondido la otra entrevistada, Mercè Martínez, pero el director de la obra tenía ganas de desembuchar: "Creo que hay excesiva oferta de teatro catalán. No es falta de espacio, es excesiva oferta. El tigre estará cuatro semanas y podría estar dos meses pero todo el mundo necesita fechas. El público va despistado, no sabe qué ir a ver. Es repartir un pastel para muchos, un añico para cada uno. Hay mucha gente joven que se quiere dedicar a esto. No hay trabajo para todos. Es un trabajo muy precario, no podemos ser tantos porque no hay tanto público. Tenemos que hacer menos cosas que duren más tiempo. Hay mucha gente joven que tiene que tener un plan B". Parece que diga jóvenes actores y directores, dejad espacio a los grandes y dedicaos a hacer otros trabajos, como Mercè Martínez que en pandemia trabajaba en una empresa de electrónica. Un discurso controvertido que ha levantado la voz de otro veterano, Marc Martínez, de 58 años, que es actor y padre de un joven actor, su hijo León:

Marc Martínez TV3
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Martínez rebate los argumentos de Madaula llamándole cuñado y asno: "Cuñadismo ilustrado. Sabéis qué pasa, que es gente que ha hecho tanta tele que después en la radio, piensan que pueden decir este tipo de burradas y quedarse tan anchos. Como no ven la cámara". Madaula ha hecho tele y se sabe popular, envalentonado para decir lo que dice. Es libre para expresarlo y los otros de rebatirlo. No es habitual un actor clavando una bofetada a otro, y son de la misma generación, rondando los 60. Valiente Marc Martínez.