Entramos en Semana Santa con uno de los temas más candentes aún por resolver: la separación Bustamante-Echevarría.
La actriz fue la primera en dar la cara dos días después de la noticia, casi entre lágrimas, para dejar claro que algunas cosas dichas no eran ciertas.
A mediados de esta semana, Bustamante se ha pronunciado -visiblemente enfadado con la prensa- para desmentir que hayan roto, y sólo hablando de "distancia".
El problema es que este "distanciamiento" parece profundo, y eso hemos podido ver este mismo miércoles.
Bustamante y Echevarría se han tenido que ver las caras a la fuerza, explica Vanitatis, a causa de su hija Daniella.
La niña había pasado la primera mitad de las vacaciones de Semana Santa con su padre en la localidad natal de este, San Vicente de la Barquera (Cantabria), y ha sido Bustamante que ha trasladado a Daniella hasta Carreño, el refugio asturiano donde se encuentra Echevarría. 134 kilómetros de desplazamiento que han llevado a la -en principio- expareja a verse las caras.
Habrá que ver cómo avanza la historia, pero todo indica a que las posibilidades de acercamiento -si es que las hay- son ínfimas.