El 21-D en Barcelona tiene Consejo de ministros y jarabe de palo. No será la guerra civil que Ana Rosa vaticinaba pero alguna torta se ha sorteado. Quien ha recibido es un reportero ultra, Cake Minuesa. Es como el Caiga quien caiga de la ultraderecha, sin gafas de sol pero con discurso de derechas. El problema es que no hace gracia. Ante la falta de talento para pretender ser la némesis de El Gran Wyoming, Minuesa recorre España y cuelga vídeos como el del 21-D. Algunos de los testigos presenciales le han acusado de montaje pero el vídeo deja claro que alguien con la cara tapada le da un puñetazo. Condena absoluta en cualquier agresión. El vídeo lo han aprovechado Pablo Casado y Albert Rivera.

Cakealatake es su perfil de twitter. Muy preciso. En el vídeo repite "Estamos trabajando por favor" mientras le mueven la cámara. Un hombre con la cara tapada lo agrede y él dice ""Estoy bien, se demuestra que estos que me insultan con un hijo de puta no tenían nada más que hacer que golpearnos. Esta señora dice que es un montaje. Esto es lo que hay. Es la gente, claro es un montaje. ¿Que vengo a provocar? ¿Todo lo que no sea CDR es provocar. ¿Lo que no sea que me partan la cara es provocar? ¿Esto es ketchup?". Se saca sangre de la nariz con un kleenex y una señora le regala un cruasán "en señal de paz".

Intereconomía

Un vistazo de los vídeos del reportero en Youtube da fe de que le acostumbra a pasar siempre cuando recorre el país: "Descomunal linchamiento a Cake Minuesa tras ser AGREDIDO e INSULTADO por separatistas en Barcelona". "Monedero da un cabezazo a Cake Minuesa". "Cake Minuesa, amenazado de muerte por denunciar el homenaje del primer asesino de ETA". "La Policía Foral INSULTA a Cake Minuesa e intenta detenerle en Alsasua"​... Y así hasta el infinito. Pobre chico, tiene un imán para ser insultado, agredido y golpeado. Será mala suerte. Convengamos que nadie agreda a nadie y a quien agreda que pague.