Hay gente que se alimenta exclusivamente de pollo. Mejor dicho, de 'pollos'. Una dieta poco variada y no muy recomendable por cuestiones de salud, pero que es la favorita en la ultraderecha española. Una especie de dieta Dukan facha, pero que en vez de adelgazar la grasa, actúa selectivamente en el raciocinio. El reportero ultra Cake Minuesa la conoce bien: lleva años practicándola. Come a todas horas, aunque sus favoritos se los zampa en Catalunya. Y sabe dónde encontrarlos, intentando reventar actos de importancia para millones de catalanes, como demostró recientemente en la Diada Nacional, con un show penoso en la ofrenda floral a Rafael Casanova.
Cake se quedó con ganas de más y ha vuelto a Barcelona con motivo del tercer aniversario del 1-O. Es gato viejo en eso de provocar, y fue buscando bronca en la concentración de la Plaza de Sant Jaume, junto a los CDR. Su presencia es motivo suficiente para encender la chispa del conflicto, y tardó segundos en encontrarlo. Fuera de sí, fachenda y agitador, tuvo que salir por patas después de ejecutar su numerito. Los manifestantes se abalanzaron, abucheándolo. El disturbio fue notable, e incluso recibió una golpe con un cartel a la cabeza durante su huida. Eso sí, seguía gritando y enfrentándose incluso con los periodistas, como el compañero de El Caso.cat Guillem Ramos Salvat, al que cogió por la cabeza por equivocación. La tensión era máxima, y la BRIMO de los Mossos intervino, llevándoselo del gentío al que se enfrentaba y ahorrarle una 'cake', una galleta. Las imágenes y vídeos de El Nacional.cat son bastante explícitas.
También se vivió tensión con la presencia de Javier Negre, aunque el show de Minuesa acaparaba toda la atención.
Que Colau no monte el belén esta Navidad. Con Cake sobra.