El PP ya tiene nuevo jefe de filas después de que Pablo Casado huyera con el rabo entre las piernas más rápido que la gaviota que representa su partido. Alberto Núñez Feijóo ha sido proclamado nuevo presidente del partido después del 20.º congreso extraordinario que se ha celebrado en Sevilla. El gallego ha sido escogido por un porcentaje escandalosamente favorable, obteniendo el apoyo del 98.35% de los asistentes, recibiendo 2.619 votos a favor, sin tener ninguno en contra y sólo con 44 votos en blanco. La flor y nata de los populares se reunió en la cita, los de ahora, y los de antes. Estaban Casado, Isabel Díaz Ayuso, el expresidente del gobierno Mariano Rajoy o el otro expresidente del PP, un José María Aznar que entró de manera telemática porque tiene la covid. Todo el mundo regalándole las orejas a Núñez Feijóo y dándole golpes en la espalda. O vete a saber si puñales en la espalda, que a veces no es fácil ver la diferencia.
Para los observadores del lenguaje no verbal era muy esperada esta cita para ver qué paripé haría la presidenta de los madrileños, la principal razón del inicio del fin de Pablo Casado con los populares. La presidenta de la comunidad madrileña, a quién muchos señalan como principal culpable del circo en el cual se convirtió su partido hace unas semanas, estaba en Sevilla y allí protagonizó un par de situaciones peculiares que alguna analista ha sabido ver. Como la experta en comunicación y colaboradora del Tot es mou de TV3, Isabel Díaz Ayuso. Primero, con el saludo del triunfador del fin de semana, Núñez Feijóo, que "por lo que sea, prefiere mantener distancias con Ayuso," y que pasó olímpicamente de saludarla de manera efusiva como al resto:
Aquí vemos a Ayuso con una camisa a rayas, pero este fin de semana también la hemos visto vestida de manera más cómoda, con una americana y una camiseta de algodón. ¿Cuál? ¿La camiseta que creó el Grupo Parlamentario de Más Madrid con el eslogan 'A mí también me ha insultado Ayuso'? No. ¿La camiseta de su querido Real Madrid? Tampoco.
Ayuso optó por otra camiseta con un estampado que ha llenado de orgullo y satisfacción a muchos y ha irritado a muchos otros. Entre estos, a los que están hartos de que todavía haya hoy en día una cosa como las corridas de toros y a los que no habrá gustado el mensaje subliminal que se desprendía del dibujo que llevaba. ¿Cuál? Una imagen del torero Manolete. La historia dice que quien lo mató fue el toro Islero en la plaza de Linares el año 1947. Pero a menudo su nombre se ha utilizado para quejarse públicamente cuando te culpan de todos los males. Y según parece, ahora también culpan a Ayuso de todos los problemas del PP, incluso, de haber matado a Manolete. El diario Las Provincias escribía hace unos días un artículo, de título "Y la muerte de Manolete, de Ayuso también", donde se decían cosas como “La coña de que todos los males habidos y por haber se los asignen por castigo a Ayuso llevará a la reelección de su candidatura en Madrid. Circulan chistes, memes y todo tipo de genialidades que relacionan a Ayuso como culpable, desde el bloqueo del Canal de Suez por el buque encallado hasta la muerte de Manolete”. ¿Y qué ha hecho Ayuso? Ponerse una camiseta del torero:
Como destaca muy bien este usuario, las cornadas que ha habido y seguirá habiendo en el PP continuarán a la orden del día. Tiempo al tiempo. ¿Será Ayuso capaz de torearlas? ¿O será quién las siga dando?