¿Quién es Can Yaman? Antes que actor turco, un icono sexual. Estrella fulgurante y protagonista de la teleserie Erkenci Kus, que arrastra miles de seguidores a cada TV del mundo que la emite. El acceso de fiebre de las series turcas está en auge y Antena 3 se forra gracias a culebrones asiáticos. TV3 lo intentó con el culebrón Germans, pero fallido. Sólo Antena 3 lo sabe programar, ha acostumbrado el paladar de sus espectadores al mal doblaje y la calidad de Serie B de las telenovelas de Turquía. Culebrones como Kara Sevda o Fatmagül son éxitos inexplicables. O explicables por uno de los protagonistas, un hombre que sobresale por encima el resto. Sobresale por ancho, alto barbudo y extraordinariamente atractivo, Can Yaman:
El actor tiene la edad de Cristo, 33 años y casi el mismo número de seguidores. Será herejía la metáfora pero Can Yaman es Dios y en Italia son tan conscientes como en España, por eso lo han escogido para la campaña más importante del año, la de vender calzoncillos por Navidad. Can Yaman pone cara, y lo que no es la cara, pone el paquete a las órdenes de la empresa Dolce & Gabanna para vender ropa interior. El resultado es especialmente hot: un Can Yaman más sexi que nunca. Venderá calzoncillos como churros. Si son las señoras las que compran ropa para los maridos, agotarán las existencias. Con las piernas abiertas, un manspreading de manual pero no en el bus sino la soledad del gym, de piernas abiertas muy aseado de color blanco:
Can Yaman en precioso italiano: "Desde mi llegada a Italia he sentido el abrazo y la proximidad de una marca que representa perfectamente la sensualidad y la elegancia y que he tenido el privilegio de llevar|traer con orgullo y placer en cada ocasión importante. Agradezco a Stefano y Domenico la confianza en que me mostraron inmediatamente. Estoy orgulloso de este proyecto que finalmente nos ve unidos". Orgullo turco. Todo bien marcado, la musculatura y lo que no lo es.
El pasado turbio de Can
La belleza exterior e interior no siempre se corresponden. Como cuando Can se peleó con una compañera de reparto, Selen Soyder, que llegó a amenazar a los productores con abandonar la serie porque tenía miedo de su integridad. Según parece, Yaman le tiró una taza de té hirviendo en medio de una discusión. El actor fue sentenciado a pagar una multa de más de 1.000 euros y pedir perdón públicamente. Pero él se ha mantenido en una actitud desafiante y se niega a ir de las dos cosas.
No fue la única vez que han acusado al actor turco de agresivo. Hace poco le tiró una cámara en un grupo de fans que se querían hacer una foto con él. Unos hechos que no parecen, sin embargo, poder parar el ascenso de Can Yaman a la lista de los actores más guapos del mundo. Yes we can.