Quedan cinco meses para las elecciones municipales y los partidos empiezan a escoger candidatos. En la ciudad de Barcelona parece que la batalla será dura, con nombres muy potentes que se presentan para dirigir el gobierno municipal: Ernest Maragall, Manuel Valls y Neus Munté son algunos de los políticos que intentarán disputar la alcaldía a Ada Colau.

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Josep Bou, candidato del PP a la alcaldía de Barcelona | @ppcatala

Con un sistema de partidos cada vez más fragmentado, el PP es el grupo más minoritario del ayuntamiento de Barcelona. Junto con la CUP, los populares cuentan sólo con 3 concejales de un total de 41. Hace pocos días Alberto Fernández Díaz anunció que deja el consistorio y el PP ha tenido que buscar rápidamente otro candidato. El elegido es Josep Bou, el empresario que pronuncia algunos de los discursos más hiperventilados en las concentraciones de Sociedad Civil Catalana, pidiendo un reconocimento para los que "limpian Catalunya de la peste amarilla".

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Josep Bou es entrevistado en 'Al Rojo Vivo' | La Sexta

Hoy, en una entrevista en 'Al Rojo Vivo' ha explicado cuál será la piedra angular de su propuesta para la ciudad: "Que Barcelona no caiga en manos del separatismo". Y ha apuntado que no considera que Manuel Valls y el PSC sean sus rivales en las elecciones municipales, sino más bien potenciales compañeros para una gran alianza unionista en la capital. En definitiva, Josep Bou desea a un alcalde “que, por el amor de Dios, saque eso de los presos políticos y los lazos y que ponga la efigie del rey”. A esto lo llama "normalizar Barcelona". Un programa atractivo para dirigir la ciudad los próximos cuatro años, sin duda.

Al contrario que la Catalunya de comarcas que "está prácticamente sometida" al independentismo, dice. "El Bages, el Solsonès, la Osona, Vic, Berga... están moralmente desconectados. Yo no quiero que a Barcelona le pase esto". El candidato del PP a Barcelona cree que la moralidad y la independencia no pueden ir de la mano. Un busto de Felipe VI en el ayuntamiento, en cambio, sería toda una muestra de ética. Sobre todo si al lado ponen una fotografía de su amigo Mohammed bin Salman, de la familia real saudí. Cuando le preguntan si el gobierno del PSOE tiene que aplicar el 155 en Catalunya, lo tiene claro: "Sí, sí y sí".

Primero querían "desinfectar" Catalunya. Ahora, "normalizarla". Les molestan los catalanes que quieren un estado propio y ya no saben qué hacer para acabar con el movimiento soberanista. Sin embargo parece que lejos de desinflarse el independentismo se mantiene. Y el PP está cada vez más cerca de quedarse sin representación en ningún sitio en Catalunya.