Por encima de la rivalidad está la amistad, el respeto y el amor por los compañeros de profesión. Esta máxima, evidentemente, no siempre se cumple. Hay muchos, la mayoría, que se la pasan por el forro. No así Carles Francino y Júlia Otero. Dos periodistas, dos maestros de la radio, dos amigos, dos de los comunicadores más importantes del país... y dos personas que compiten cada tarde en las ondas. Él, haciendo La Ventana en la Cadena Ser, de 16h a 20h. Ella, con Julia en la onda, en Onda Cero, y una hora antes, de 15h a 19h.

Júlia Otero y Carles Francino

Pero ellos no son José Mª García y José Ramón de la Morena, ahora que vuelven a estar de moda por la serie Reyes de la noche. Francino y Otero están hechos de la pasta de los que piensan en el prójimo en términos afectuosos, sin envidias ni rivalidades. Y más, cuando les ha tocado vivir una sacudida tan dura. Francino estuvo muy grave después de contagiarse de coronavirus. La covid lo obligó a estar apartado del micrófono durante varias semanas. Cuando volvió, en uno de los momentos más emocionantes en lo que llevamos de año, sin poder contener las lágrimas, una de las voces que corrieron a felicitarle y darle el apoyo y la enhorabuena fue Otero, con un mensaje conmovedor:

Ahora, quien ha tenido unas palabras de calor hacia su colega, que lucha contra un cáncer, ha sido el periodista de la Ser. Y todavía tiene más valor desde donde se lo ha hecho llegar: desde casa de Julia Otero, Monforte de Lemos, el municipio al sur de la provincia de Lugo donde nació la periodista de Onda Cero. Desde allí, ha pedido al público asistente "un abrazo muy grande en forma de aplauso, para decirle que la echamos de menos, que ya está bien, que acabe ya, que le dé dos guantazos al bicho y lo ponga a pastar". Un Francino que ha empezado programa este viernes defendiendo que aunque "Somos rivales, pero también amigos. La competencia hay que entenderla así en todos los ámbitos de la vida".

Decía Francino que quizás le estaba escuchando. Lo que sí sabemos seguro es que cuando lo ha hecho, se ha emocionado y nos ha emocionado. Escuchar eso de un rival radiofónico, que habla a la misma hora que tú, tiene que poner la carne de gallina. Otero le ha devuelto el abrazo en forma de un sentido agradecimiento y, de paso, le ha hecho un par de recomendaciones, ya que se encuentra en un lugar que ella conoce muy bien: "Eres oro. ¡Quiero un mundo lleno de gente como tú!. Y no te vayas de Monforte de Lemos sin ver las joyas arquitectónicas y el paseo del malecón". De entre los muchos mensajes de oyentes que han aplaudido el gesto, y la respuesta, quedémonos con esta petición de un usuario:

Toda la razón del mundo.