Los jueves se emite por TV una casa llena de gritos, insultos, personajes que se detestan y se increpan y que provocan mucha vergüenza ajena. No es el debate de política general en el Parlament sino GH VIP, pero se parecen. El programa de Ana Rosa quería tratar unos gritos y otros. En Telecinco expulsaron al follonero Hugo y en el Parlament se expulsó a Carlos Carrizosa. Las imágenes muestran a un diputado naranja fuera de sí y Ana Rosa le ha querido preguntar cómo es la vida de un escoltado en Catalunya.
ACN / EFE
La pregunta de Quintana evocaba los años de ETA en el País Vasco, cuando los políticos tenían que mirar los bajos del coche para comprobar que no había una bomba lapa. Carrizosa ha ido más lejos: "Ni en la Euskadi de ETA se atrevieron a aplaudir a los detenidos acusados de terrorismo". La parte más personal ha estado cuando ha explicado lo que siente yendo escoltado cada día, de la mañana a las 6 de la tarde. Después de aquella hora ya tiene miedo de bajar solo al súper: "Tengo problemas para ir escoltado. A las 6 si se me acaba el aceite no puedo ir a por más porque ya no tengo escolta".
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Carrizosa está harto: "En mi domicilio me siento identificado, me ponen lazos amarillos, no puedo hacer cosas que una persona normal hace... Confío en los escoltas de los mossos porque son honrados pero cómo voy a confiar en el gobierno de Catalunya que aplaude a los acusados de terrorismo. La vida de un escoltado es asi de incómoda, pero peor lo tiene ese compañero de La Garriga que está solo como la una. Son valientes, por eso Cs tiene problemas para tener candidatos, con una Catalunya fanatizada. En un míting un médico ultranacionalista nos gritó 'Si no les gusta váyanse de Catalunya'. En Europa estas cosas han acabado como el rosario de la Aurora. Que Sánchez actúe antas que los jueces y aplique el 155". Ana Rosa ha cortado a Carrizosa para tener tiempo para hablar también de GH VIP.
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La Conselleria de Interior ha desmentido categóricamente la desprotección denunciada por Carlos Carrizosa. Pueden leerlo aquí 
Interior desmiente a Carrizosa: no es cierto que su escolta lo abandone a las 6.