El locutor de la COPE, Carlos Herrera, está a punto de hacer las maletas. Y no, no es que haya decidido cogerse unas vacaciones por digerir el batacazo electoral de los suyos. No, en su caso necesitará el equipaje para irse... al exilio. Eso, claro está, siempre que se cumplan dos condiciones. Que el PSOE pacte con Unidas Podemos para formar gobierno, y especialmente, que el campeón del unionismo radiofónico sea fiel a sus promesas. Y es que la red tiene memoria: En 2016, Herrera utilizó el sarcasmo para negar un posible pacto entre las dos formaciones españolas de izquierdas, marcándose una fantasmada. "Pido asilo en Somalia si gobierna PSOE y Podemos".
Desconocemos si Herrera está realizando las gestiones oportunas para pedir el asilo en el país africano, uno de los más pobres y peligrosos del mundo. Quizás está esperando el milagro (o el tongo) entre socialistas y Ciudadanos, para ahorrarse tener que emular a Carles Puigdemont, Toni Comín, Marta Rovira o Anna Gabriel, entre otros. El locutor de la cadena de la Conferencia Episcopal decía del posible gobierno que "Somalia me parece un paraíso comparado a lo que puede ser el gobierno que proponen" o que "las playas de Mogadiscio (la capital de Somalia) me parecen muy atractivas tal y como están las cosas". Sus bravuconadas no han sido olvidadas. Carlos, por la boca muere el pez.
La red se muere por ver cumplidas las promesas del NUNCA moderado periodista, que hoy ya ha intentado sacudirse la responsabilidad de sus palabras: "Sánchez ha ganado las elecciones a pesar de que PP, CS y Vox suman más votos que PSOE y Podemos". La técnica de Herrera es tan antigua como su estilo de entender la vida, la democracia y el oficio periodístico: No dejar que la realidad te estropee un buen titular. "Última llamada a los viajeros con destino al exilio". Herrera, te esperan en la puerta de embarque.