Carlos Latre es de los personajes televisivos más emblemáticos del panorama nacional, su gran abanico de imitaciones hace que todo el mundo se quede embobado mirándolo y reconociendo a todos los personajes que imita. Si hay alguien que siempre da su mejor cara es el humorista. Bien, rectificamos, podríamos decir que el secreto de su buen humor son las mil caras que nos regala. Y no estamos exagerando, dentro de este talento único, él es el mejor, aunque tampoco tenga demasiada competencia, estamos seguros de que nadie lo destronaría, no hay quien lo iguale. Aparecía por primera vez en Crónicas Marcianas y desde entonces el resto es historia. Uno de los invitados clave en muchos programas, encontraba su lugar profesional perfecto en el programa que describe su talento Tu Cara Me Suena, podríamos decir que de la mesa del jurado es el que más criterio tiene sobre las actuaciones, con el permiso de Àngel Llàcer claro está.

 

El formato de GestMusic ya va por la undécima temporada y aunque el imitador no haya prescindido de ni una sola, también hace carrera encima de los escenarios. Durante tres años ha triunfado con su espectáculo One Show Man y recientemente anunciaba un show especial para sus 25 años de carrera: Inimitable. Está casado con Yolanda Marcos y tiene una hija de diecisiete años, Candela, ya lleva un cuarto de siglo al gremio de la fama, 25 años que se dicen deprisa, pero no pasan tan rápidamente. Y todos sabemos cómo funciona el mundo de la fama. Dinero, lujos y ambición, el mundo de la televisión puede crear un proyecto exitoso de la nada y desmontarlo en un minuto. Carlos Latre triunfaba en TV3 como personaje imprescindible en Crackovia y Polonia, todo le iba sobre ruedas, pero en uno de los proyectos que le iba a prometer más éxito, el humorista se vio con la cartera vacía, un fracaso inesperado.

Asimismo, lo ha explicado Carlos Latre en el pódcast de Vicky Martín Berrocal, una conversación donde lo hemos oído hablar de todos los aspectos íntimos, y parece, pues, que su camino no ha estado siempre lleno de rosas. El actor ha confesado por primera vez todas las inseguridades y miedos que sufría, digamos que su talento no estaba del todo especificado, y aparecer con dieciocho años delante de la televisión, fue un golpe muy cruel."Me ha importado todo, he vivido desquiciado. Piensa que yo empecé Cronicas con dicieocho años. El mundo de la televisión es muy cruel, hay una frase que es terrorífica que es: 'no funciona', entonces dices tú, no funciona que? Por los números, ¿tu valía profesional depende de un número?" Esta fue precisamente la frase que lo hizo arruinar económicamente, concretamente dos veces.

"Me arruiné económicamente dos veces por malas gestiones y decisiones. Cuando acabé Crónicas marcianas fiché por Cuatro y allí me plantean una sitcom con la que avancé todo el dinero por esas tres temporadas, pero al quinto programa la serie estaba fuera, y yo ya había pagado por el vestuario, equipos, todo. Llegué a casa y dije: '¡No tengo ni para pagar la hipoteca'. Estaba en la mierda y sin saber qué hacer" Muy fuerte, una experiencia del pasado que nos ha dejado atónitos. Desde aquel momento el humorista ha asegurado vivir una presión constante en el ámbito laboral que no lo ha dejado disfrutar nunca de su éxito.

Como todos los iconos, las estrellas siempre tienen un pasado duro, el mundo de la televisión era cruel, así lo probó Carlos Latre.