Carlos Navarro, más conocido como 'El Yoyas', lleva una semana en busca y captura. Un juzgado de las Islas Canarias ordenó que ingresara en la cárcel para cumplir casi 6 años de condena por delitos de maltrato habitual y lesiones a su ex, la también ex concursante Fayna Bethencourt, y a los dos hijos de la pareja. El barcelonés huyó por piernas para evitar su encarcelamiento, y nadie sabía nada de su paradero. Mejor dicho: ni la policía ni los jueces lo saben, pero no así un periodista de un diario muy importante, a quien el propio Carlos llamó para citarlo en un paraje desconocido con el objetivo de ofrecerle una entrevista. El artículo, que se puede encontrar en 'El Mundo', es espeluznante.
La historia de 'El Yoyas' es de gran gravedad. Su paso por el concurso y romance con Fayna hacían prever que la cosa no pintaba bien. Agresivo y mal hablado, fue expulsado del reality por un episodio violento contra ella. Él aseguraba que era una broma, pero estirar del pelo y empujar bruscamente nunca puede ser considerado un juego ni una gracia. Ella no vio esta señal de alerta y tiró adelante una relación que ha acabado siendo terrorífica. El relato de la Fayna es estremecedor. El caso saltó a los medios cuando en 2020 fue condenado por primera vez. Su recurso fue rechazado por el Supremo y el juzgado ordenó que entrara en prisión. Ha conseguido aplazar el ingreso, pero ha llegado al final del camino. Solo quedaban dos opciones. Y ha escogido la peor: huir.
El impactante aspecto de Carlos Navarro escondido en el bosque, y su relato victimista
La entrevista es impactante, como el aspecto del personaje. Envejecido, con el pelo largo y una barba muy dejada, y luciendo una camiseta contra la Ley de Violencia de Género. Para llorar. Defiende su inocencia, dice que lo han condenado sin pruebas, ni ningún informe médico ni denuncias previas. "Soy un cabeza de turco", asegura. "Por culpa de esa ley hay muchos padres como yo, que llevo casi seis años sin ver a mis hijos y ahora escondiéndome como si fuese un criminal. No he hecho nada en mi vida para merecerme esto". Vaya, resulta curioso teniendo en cuenta que la sentencia indica que instauró un "clima de terror" que afectó a los chiquillos y que mantuvo una actitud de "total desprecio" por la dignidad de su familia, a la que insultaba y golpeaba. Los menores testificaron contra su padre, explicando estos hechos. A pesar de esto, Carlos y su defensa insisten en la teoría de que es un relato inventado por Fayna. Y como la justicia no le da la razón, se ha largado.
'El Yoyas' explica sus problemas con el alcohol y lamenta que le han arrebatado a sus hijos por una condena injusta
Carlos se presenta como un padre al que le han privado de estar con sus hijos, "lo que más me duele es perderlos". No parece, sin embargo, ajustarse al contenido de la sentencia, que considera probado que hablaba de forma violenta a su hija de 11 años cuando le llevaba la contraria. Explica que actualmente "no vivo, improviso, con los bolsillos vacíos. Estoy jodido", y justifica no haber pedido ayuda profesional para tratar sus problemas porque "mi psicólogo fue el whisky y mi terapia el espejo, y eso me llevó a siniestrar dos coches en seis meses y que mi vida me importara una mierda". Terrorífico.
La cuenta atrás ha empezado, y 'El Yoyas' sabe que acabará en la cárcel. ¿Se entregará o lo capturarán? Esta es la única duda.