Hoy era el día: un juzgado de Madrid era el escenario del inicio del juicio por la presunta violación a Carlota Prado por parte de José María López, unos hechos que tuvieron lugar en la madrugada del 4 de noviembre de 2017 mientras ambos eran concursantes de 'GH Revolution' en Telecinco. La espera ha sido larguísima, más de 4 años, para intentar poner luz a un caso tan polémico como mediático.
OS REFRESCO LA MEMORIA PARA TERMINAR EL DÍA. LO QUE PASO EN EL CONFESIONARIO ES UNA TORTURA PSICOLÓGICA, EMOCIONAL Y FÍSICA PARA EMPEZAR A CONTAR. https://t.co/QiKFsGwHJH
— Carlota L. Muñiz Prado Alonso (@CarlotaWPrA) January 23, 2022
La sorpresa, sin embargo, ha llegado minutos antes de que empezara la primera sesión: Carlota no se ha presentado en sede judicial, y su abogado ha solicitado la suspensión por "problemas psiquiátricos de gravedad" de su cliente, que tendrá que ser examinada. Según ha detallado el letrado, Prado fue ingresada durante el mes de diciembre por esta misma razón. Ahora bien, todo el mundo creía que estaba recuperada y dispuesta a luchar en plenitud por su versión. Pero esta misma mañana la defensa ha comprobado que "estaba totalmente imposibilitada". El juez ha aceptado la suspensión y que un forense evalúe su estado mental antes de reanudar el juicio. Los abogados defensores del acusado se han opuesto a la medida, argumentando que Carlota ha sido muy activa en redes sociales. Unas redes donde hemos encontrado una serie de mensajes muy inquietantes.
El calvario de Prado ha sido descomunal: aparte de las secuelas de aquella agresión y todo el alboroto que ha habido a su alrededor, ha sido acusada de todo tipo de cosas. Ella las rechazaba con publicaciones contundentes: "No he sido narco, ni trabajado para ninguna mafia. Nunca me he prostituido. Nunca he sido drogodependiente. Nunca he matado a nadie. Nunca le he pegado a mi padre". Durante este vía crucis encontró la ayuda emocional y sentimental de un personaje sorprendente: Coto Matamoros, el polémico hermano de Kiko. Su relación, sin embargo, ya no existe. O mejor dicho, ha pasado del blanco al negro. Atención a lo que le decía hace días en Instagram: "Coto, estás amenazado, nervioléptico de mierda. Queda conmigo en Madrid, cabrón. ¿Después de la que liaste no nos vamos a ver? Cógeme el teléfono por Dios".
Todavía más escalofriante es la última publicación. Tiene las muñecas y las manos vendadas, y dice lo siguiente, también haciendo referencia a Matamoros: "El gilipollas de Coto dice que la amistad entre Hombres y Mujeres no existe. El Honor si que escasea. Los cojones de verdad son lodo puro. De estómago a nudillos. ¿A ti te habló Belcebú? ¿Y que carajo te dijo?". Hace 10 horas compartía un story muy extraño, anunciando que llegaba a Madrid para asistir a la vista. Hace referencia a partidos políticos como VOX, PP o Podemos en Cádiz, incluso a Santiago Abascal.
Veremos qué dictaminan las autoridades sanitarias y judiciales, y cómo continúa esta historia de terror.