La presentadora de Mediaset, Carme Chaparro, es muy activa en sus redes sociales. En Instagram, casi a diario, publica fotografías suyas, ya sean del pasado, presumiendo de estilismos o relajada en su casa. Un ejemplo de que Chaparro es una mujer todoterreno, que se atreve con todo y siempre aboga por la naturalidad. Una naturalidad de la que presumió a mediados de diciembre con una fotografía con la cara lavada, después de hacer una rutina de ejercicios.
"Sudada, sin filtros y tras el madrugón. Así soy al natural cuando hago ejercicio" escribió hace unos días la de Salamanca en el mundo viral. Una captura donde Carme Chaparro aparece con el pelo recogido, una enorme diadema, la cara sudada y luciendo un top negro. Un atuendo muy cómodo, las cosas como son. Una estampa aplaudida por algunos y criticada por otros. "Bien de bótox", "Con bótox y ácido hialurónico", "Con un poco de menos de bótox estarías más natural" o "Bótox y relleno" son algunas de las cosas que le dijeron. Hablamos de esta foto:
Unos ataques, en relación a su físico, a los que Carme Chaparro ahora se ha atrevido a responder. Lo ha hecho muy molesta, a través de sus historias de Instagram. "El bótox del labio... Si es que hay que quererlos", dice la de Mediaset en relación a los que la atacan por abusar de la cirugía estética. Y añade, para dejar claro que supuestamente no se ha retocado la cara: "Será que no se me ven las arrugas y la flacidez... Siempre con la misma historia". La polémica está servida. Sus seguidores convencidos y Carme lo niega. Una imagen vale más que mil palabras. Juzguen ustedes mismos.