El derbi catalán de la Liga de fútbol masculina, el Girona-Barça, deja un regusto intenso: ambos equipos lucharon por la victoria sin descanso, hubo emoción, incertidumbre, polémicas, pasión. Los culés ganaron gracias a un gol de Pedri, aunque su juego no entusiasmara a los aficionados azulgranas. El canario volvía a mojar por tercer partido consecutivo, y lo hacía vistiendo una camiseta muy especial: un nuevo diseño que representa la senyera, emblema oficial de la catalanidad. Un gesto que, sumado a la victoria por la mínima del F.C.Barcelona y lo que eso supone desde el punto de vista de su inmediato perseguidor y rival acérrimo, el Real Madrid, hizo despertar las más bajas pasiones de los seguidores blancos de talante más exaltado... y más españolista.
El análisis del partido, según un destacado miembro de este sector ideológico, es de tarjeta roja directa. A la calle. El colegiado enseñó esta cartulina al entrenador local por un ramalazo de furia durante el transcurso del partido. Nos sabe mal por el Míchel, el técnico madrileño que es un ejemplo de tolerancia, respeto e integración en Catalunya. Sus avances con el idioma lo han convertido en un referente y alguien muy querido. El árbitro se lo podía haber ahorrado, pero que invadiera el terreno de juego durante una protesta provocó esta medida drástica. Menos expulsiones por estas nimiedades y más sanciones a aquellos que incendian el ambiente y la convivencia, a los provocadores, a pirómanos que utilizan el fútbol para liberar sus demonios personales. Por ejemplo, los del periodista Juanma Rodríguez, en nómina de Federico Jiménez Losantos. Él no pisa el césped ni corre detrás de la pelota. Él práctica el juego subterráneo delante del micrófono, del teclado del ordenador o de su teléfono móvil.
Juanma Rodríguez, periodista deportivo merengue, españolista y anticatalán
Rodríguez es más merengue que los cimientos del Bernabéu. Defiende la causa blanca con uñas y dientes. Y nos parece fantástico, maravilloso, ideal. No nos pondremos nunca de acuerdo, pero es totalmente lícito. Otra cosa es que el argumentario sea patético. Como cuándo quiere ridiculizar a la defensa del femenino Mapi León, o como cuándo justifica la derrota del Real Madrid en la final de la Supercopa, arrasado por el Barça de Xavi Hernández. Juanma es la gota malaya, no dejará nunca de crear jaleo y ser despectivo. Que lo haga desde el punto de vista deportivo, vale. Si lo hace con otros intereses ya hablamos de otra cosa. ¿De qué? De catalanofobia. Así de sencillo. No es la primera vez, como eso que dijo de "la puerta 155" del estadio blanco.
Rodríguez desprecia el catalán y el nombre oficial de Girona: repite la provocación en 4 ocasiones
Pues bien, Juanma Rodríguez ha vuelto a enseñar la patita. La del desprecio a Catalunya, una tierra, un país, una bandera y una lengua. Que dedique un tuit para desmerecer el triunfo culé repitiendo incesantemente el nombre "Gerona" no es casual ni inocente. Es una forma de tocar lo que no suena. Lo hace en 4 ocasiones en un escrito de 8 líneas cortas. "En Gerona y ante el Gerona", la broma le debe hacer gracia. Solo se ríe él y cuatro de su cuerda. El resto, o buena parte de los que han leído el tuit, lo ponen a parir. "Gargamel", le llaman con mala leche.
Que et callis Joan Manel pic.twitter.com/FJjwZpKVfo
— raul �������� (@camenraul) January 29, 2023
Girona , maleducado y merengue lo tienes todo
— Luis Roman (@luisbcn) January 29, 2023
Tanto el nombre de la provincia, ciudad y club es GIRONA.
— Lluís 7 ���������������������������� (@lluisb170) January 29, 2023
Gargamel es Girona, de nada
— Juanmi Nievas Ø (@jnmnvs) January 29, 2023
Creo que se ha dicho poco lo de «el Gerona de Gerona».
— granajax (@gran_ajax) January 29, 2023
Si 'Gerona' es Girona, ¿Madrid es 'Madrit'? ¿O 'Madriz'? Joan Manel, frena, que te pierdes.