Arturo Pérez Reverte es aquel señor murciano de 73 años y 2,5 millones de seguidores en twitter donde se define cómo lo hacen todos los fachas: apolítico. Lo dice a su manera: "No tengo ideología, tengo biblioteca". Aquella petulancia de los literatos. Naturalmente que tiene ideología, de las inconfesables: misoginia, centralista, ultraespañolista y catalanófoba. Ya la mostró hace unos años en una entrevista en el canal de Youtube de uno de los youtubers más famosos de Catalunya, Jordi Wild. Pérez Reverte y su fijación y obsesión anti-indepe. Arturo: : "Estamos haciendo esta entrevista en Cataluña. No vale que digas (posant veueta ridícula) 'Los españoles son malos. Los piolines han pegao mucho, España nos roba'. Que los piolines no te condicionen. Vete al s.XVIII a los procesos de construcción europeos y fórmate una actitud razonable. Tú puedes ser independentista pero con conocimiento, con un proceso intelectual. Sino vete a la mierda". Ahora ha vuelto cuando alguien le ha pasado la foto de una calle de Esplugues de Llobregat:

Si (salvando las abismales distancias) un día de borrachera deciden dedicarme a mí una calle, exijo que me llamen Arturet. pic.twitter.com/ScUybvCtwL
— Arturo Pérez-Reverte (@perezreverte) March 23, 2025

Pérez-Reverte está encantado de haberse conocido y destila ideología en cada tuit. En este destila odio a la lengua catalana por el simple hecho que un Ayuntamiento medio, en Esplugues viven unas cincuenta mil personas, decide el nomenclátor de la ciudad y en uno de sus callejones, uno pequeño, casi intransitado, le pone el nombre de Pau Ruiz Picasso, el artista nacido en Málaga que pasó buena parte de su vida en Barcelona. El famoso pintor fue bautizado con el nombre de Pablo pero en Esplugues traducen los nombres de pila a la lengua del país, el catalán. Y eso saca de quicio al murciano Reverte, que para disimular la catalanofobia hace un tuit burlón: "Si (salvando las abismales distancias) un día de borrachera deciden dedicarme a mí una calle, exijo que me llamen Arturet". El tuit lo tiene todo: catalanofobia y falsa modestia: entre Picasso y Pérez Reverte no es que haya una distancia abismal, es que uno es mundialmente conocido y admirado y el otro sale en El hormiguero.

Pérez-Reverte exige que cuando un municipio ponga su nombre en una calle le ponga Calle de Arturet Pérez-Reverte. Hay otra obsesión que lo mata: no lo podrá ver en vida porque cuando evidentemente un pueblo de su cuerda ideológica lo incluya en el nomenclátor lo hará con Pérez-Reverte ya muerto como marca la normativa. Eso es lo que atormenta a su vanidad y un ego desmesurado. Mira que hay causas para abanderar con 2,5 millones de followers y Arturet escoge atacar la placa con el nombre de una calle en Catalunya. ¿Por qué? ¿Paseaba Arturet porEsplugues? No, lo hace para atizar el odio a los catalanes: "Mirad lo que hacen con nuestros iconos como Picasso, lo hacen pasar por catalán". En twitter le han dicho que chochea:
Ahora le explicaré una historia que -pienso- que le gustará: en un pueblo del Vallès, hicieron una gran plaza, que es el centro de actividad y juegos del pueblo, y le pusieron "Plaza de Pau Picasso".
— Enric Gomà (@EnricGoma) March 23, 2025
Para hacerlo más corto, todo el mundo le dice 'la Paz'. Como si fuera la Paz de Westfalia.
¿Le molesta que una calle esté rotulada en lengua cooficial? Creo que mas que tomarlo a mal, es un aprendizaje mutuo que falta mucho en España. Luego permitimos un mal uso del castellano.
— Antonio José Ruiz Campillo (@RuizC_AntJ) March 23, 2025
Si no me equivoco, esa calle está en Esplugues y yo trabajaba allí. Siendo andaluza nunca me molestó escribirlo así, no entiendo tanto drama con absolutamente todo
— Madre de Dana (@tsconburnout) March 23, 2025
Muy borrachos, pero muy y muy borrachos tendríamos que ir para dedicarte una calle en Catalunya.....per variar, meando fuera de test|tiesto.
— enric jane ferre (@enricjane) March 23, 2025
Lo informo de que el propio Picasso en una estancia en Catalunya en 1906, frepat por|para la vuelta de soldados mutilados de la guerra española de Cuba, escribía en catalán y se hacía decir "Pau de Gósol" jugando con la polisemia de su nombre en catalán.
— Quim Ducet Balaguer (@QuimDucet) March 24, 2025
¡De nada!
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La vecina andaluza de Esplugues arruina a Arturet con una verdad anticatalanófoba: "Yo trabajaba allí. Siendo andaluza nunca me molestó escribirlo así, no entiendo tanto drama con absolutamente todo". Se entiende muy bien con la diagnosis: catalanofobia.