Cayetana Álvarez de Toledo y Lídia Heredia, una pareja de baile que acaba mal. La candidata del PP en Catalunya vuelve a hacer entrevistas electorales en el plató de Els matins. Solo 15 minutos por orden de la Junta Electoral, en proporción a su fracaso electoral en Catalunya. Una única diputada del PP representando a 7,5 millones de catalanes. Un ridículo electoral. Quien se pensara que la bofetada de las anteriores elecciones calmaría a la XIII marquesa de Casa Fuerte se equivocaba. Ha vuelto la tensión a TV3.
Sentadas como en a terraza de un bar, dos taburetes y dos vasos. Ni así se ha relajado Cayetana. Tensa y con alguna dificultad para entender el catalán. Álvarez "El procés demuestra que no existe un solo pueblo, existen almenos dos. Esta TV3 no lo refleja". Empieza el show CAT (las siglas de Cayetana Álvarez de Toledo) contra TV3. Y la última polémica de un programa de humor, cuando Toni Soler hizo un gag desafortunado sobre perros y mossos. La excusa para intervenir toda la cadena.
Cayetana hace un Arrimadas y saca papeles, la denuncia de los sindicatos de mossos contra Toni Soler: Yo le he traído las denuncias presentada por los mossos d'esquadra contra TV3. La fiscalia investiga por llamar putos perros de mierda a los mossos. Ocho millones de euros gana esa productora al año, 80 millones con el paso de los años. Toni Soler con sus programa gana eso en esta casa. Y pagando con el dinero de todos los catalanes se ha llamado perros a los mossos" . Heredia ya tensionada se pasa a hablarle en castellano: "En un programa de humor. Se han disculpado. A la reflexión estamos llamados todos, especialmente los trabajadores públicos".
Cayetana: "Apoyo a los mossos. Las invito a una reflexión. Reflexionen lo que TV3 hace desde hace 40 años: aislamiento, arrinconamiento, señalamiento, desprecio, burla y mofa de los constitucionalistas". Heredia casi no ha vuelto a dirigírsele en catalán. Era el momento clic, que Heredia sabía que pasaría: Cayetana contra TV3 en TV3. Y la entrevista ya no ha remontado. Heredia quería hacerle el típico test al candidato "¿Escuela privada o pública para sus hijas?" Cayetana a su bola: "Privada, pero hablando de la educación en Catalunya: no es normal, hay jóvenes que montan algaradas contra el Estado de Derecho". Un pitido ha puesto fin a la conversación. Era el gong del final del combate de boxeo.