Clara Chía sigue sin abrir su cuenta de Instagram. Con una foto de perfil preciosa encima una roca en la playa con jersey azul. Lánguida, nostálgica, guapísima. Nunca enseña los ojos, quizás porque como algunos detractores le recuerdan es estrábica, bizca, pero eso sube el precio de sus fotos de calle. Si abriera la red los paparazzis dejarían de retratarla en los restaurantes donde come con su famoso novio Gerard Piqué. La última imagen juntos, muy buscada, es como siempre: vestidos de negro, casual, gafas de sol y una expresión corporal enfadada: "Cuando tu novio ya pidió el menú por ti y te pones en modo berrinchuda Clara casi siempre sale en modo berrinche en las fotos":
Cuando tu novio ya pidió el menú por ti y te pones en modo berrinchuda 😂♥
— ♥ CUENTA HACEN ♥ a Clara Chia y Gerard Piqué ♥ (@ClaGerFans) April 30, 2023
Clara casi siempre sale en modo berrinche en las fotos 😂 pic.twitter.com/AukP5dA8on
Como dice el inicio de Anna Karenina, las parejas felices se parecen todas. Las infelices lo son cada una a su manera.Shakira y Piqué empezaron con pasión, un golpe de atracción al Mundial grabando el waka waka. Siguieron en secreto, los dos tenían pareja, el hijo del presidente argentino y la hija de un poderoso perniler. Ella vino a vivir a Barcelona, se hicieron una casa, tuvieron un hijo y otro, se discutieron, se separaron y ahora él está con Clara Chía. Parece que la pareja de Piqué con Shakira solo estaba tensa y que la pareja de Piqué y Clara es un camino de flores y violas. Y no. Hay que recordar otros bornques como la del partido de su equipo la Andorra con el Badalona y estaban de morros. Fotos muy explícitas, cada uno mirando a un lado sin ni hablarse.
Pero la bronca deja paso al amor. Algún malentendido o la pereza de Clara Chía, la señora presidenta, de acompañar el presi a un partido aburrido. Piqué sabe como hacerse perdonar y lo llena de besos. La magia del primer año de relación, cuando las broncas duran poco. En la parte alta del campo, entre palomitas y refrescos, besitos salados. Primero tímidamente Piqué en la oreja de Clara, después ya le busca la boca y al final un morreo de los dos entregados a la causa:
En la agencia que captó las fotos lo explicaban así: "Gerard Piqué y Clara Chía: una cita que empezó con un enfado y terminó con besos apasionados. Este miércoles 'algo' sucedió entre ellos, ya que las muestras de cariño no estuvieron muy presentes en su cita. Escribiendo y jugando con su teléfono móvil en todo momento, la joven no estuvo demasiado pendiente de lo que sucedía en el terreno de juego y lo que más nos llamó la atención es que, lejos de mostrarse cariñosos, la pareja estuvo bastante distante y, a juzgar por sus gestos, parecían enfadados. Tras vivir una 'discusión' la pareja consiguió aclarar el debate que habían tenido minutos previos y acabaron la noche compartiendo besos y muestras de complicidad". Amor en Badalona, en Muntaner, en Tuset o por todas partes. Excepto a Miami. Allí Clara Chía no puede poner un pie por contrato. El acuerdo de separación de Shakira es ley.