El affaire Dani Mateo continúa su curso. Las huestes nacionalistas han desplegado todos sus efectivos y han abordado contra el humorista catalán de El Intermedio por tierra, mar y aire por "osar" sonarse con la bandera española en un gag de su programa.
Frank Cuesta, haciendo gala de su finezza, le ha dicho "a ver si tienes huevos de cagarte en una estelada o en la bandera de ISIS", por ejemplo. Y ahora, una empresa con quien Mateo tenía una relación publicitaria, ha decidido darle la espalda porque están "claramente del lado de nuestra Constitución y abogamos por el respeto a los símbolos". Los autores de estas palabras son los responsables de Clínica Baviera. La página web de este instituto oftalmológico tiene una frase promocional: "Di adiós a tus gafas con cirugía refractiva láser". Los que han demostrado no tener bien la vista ni ver las cosas en su justa medida son ellos mismos. Y ni una operación con láser se lo arreglará.
Esta es la página principal de la clínica. Una cabecera donde se ven las caras de tres personalidades famosas que publicitan las virtudes del centro. Se ve al exconcursante de Operación Triunfo, Ricky, la presentadora de First dates, Lídia Torrent, o el colaborador de El hormiguero, Marron... El caso es que en esta foto falta alguien: Dani Mateo. Esta es la foto que había en su cuenta de Twitter antes de que Mateo se sonara en la bandera española:
No. No tienen problemas de visión y tienen que ir a la Clínica Baviera a que se lo arreglen. Efectivamente, en la foto de debajo ven a Dani Mateo y en la de arriba, no. ¿Por qué? Por atentar contra la Carta Magna y "el marco de convivencia que supone la Constitución":
La Clínica se ha apuntado al linchamiento del cómico con la retirada de sus publicidades, señalándole directamente y borrándole literalmente de la publicidad. Pero lo que han demostrado es no tener muy buen ojo a la hora de tomar esta decisión, ya que las dioptrías de muchos usuarios de Twitter están en perfecto estado, y cuando han leído el comunicado del instituto oftalmológico, han puesto en marcha ellos también un boicot, con comentarios tan contundentes como estos:
A los del departamento de atención al cliente de la clínica sí que les harán falta gafas: vaticinamos una avalancha de mails con cancelaciones de contrato que tendrán que leer durante los próximos días.