El Barça ha caído eliminado de Europa de la manera más cruel, con dos goles de ventaja en el minuto 20 del partido de vuelta en casa (si es que Montjuïc se puede considerar casa). Lo tenía todo de cara para pasar a semifinales pero ha vuelto a caer en el mismo problema, la debilidad psicológica en la Champions donde un tropiezo yendo con ventaja holgadan el marcador condena el equipo. La expulsión de Araujo era grave pero más grave ha sido no saber coó proteger los dos goles de ventaja durante una hora. Xavi Hernández no es el hombre capacitado para cambiar esta tendencia pesimista del equipo y habrá que confiar en un entrenador de carácter, prestigio y trayectoria europea. El problema para los seguidores culés es que solo pueden ver el partido en una cadena: Movistar. El drama es peor en el postpartido ya que no existe la opción de escucharlo con un audio alternativo cuando Movistar repite las mejores jugadas: todo el mundo tiene que escuchar el audio de Susana Guasch, catalana, antibarcelonista y obsesionada contra Pep Guardiola por lo que significa para los culés.
Después del escándalo monumental en el partido de ida, era muy esperado cómo se comportarían Movistar y Guash. Hace una semana, la UEFA se puso de acuerdo con PSG y Barça para autorizarlos a no hacer declaraciones a Movistar debido a los comentarios racistas del Mono Burgos, despedido, y la connivencia entre carcajadas de la moderadora, Susana Guasch, apercibida que no lo repitiera. Con esta advertencia, Guasch tuvo que controlarse los ramalazos anticulés pero no pudo resistirse a destacar al jugador más poco honorable, mal deportista y de gestos despreciables que era Dembele. Lo más normal era comentar cómo oste ex del Barça celebró los goles contra su exequipo de manera antideportiva, traicionando la sana costumbre entre jugadores de no hacer leña cuando marcas a un exequipo, Susana Guasch soltó su rabia, su alegría por la derrota culé e hizo lo de siempre, intentar humillar a los culés. Utilizó esta desafortunadísima expresión: "Dembelé vacuna al Barça".
Susana Guasch después de entrevistar a Dembelé: "Es la vida, es el fútbol. Quién iba a decir que sería él quien vacunara al Barça en esta eliminatoria". Una expresión fea, de desprecio al Barça, de es quien se la ha metido doblada al Barça, vacunado las nalgas, metido hasta donde le sduele... que en twittter ha encendido los ánimos, que venían ya calientes contra la periodista perica y del Real Madrid:
El problema de Movistar era si después del lamentable papel de la moderadora en el episodio escandaloso de enviar a Yamal a hacer malabares a los semáforos para ganarse la vida, por menor y por marroquí, no convenía poner de moderador del programa a alguien más normal, cualquiera. Alguien que no se hubiera roto de risa, que hubiera parado el racismo y que hubiera pedido perdón, cosa que la presentadora no ha hecho. Ni hará nunca. Movistar no ha entendido nada.