El Gobierno no cierra Madrid, deja fronteras abiertas, transportes públicos plenos a rebosar y en funcionamiento, abre y cierra peluquerías de forma inverosímil y ahora también envía a un batallón del ejército desde Zaragoza a Barcelona por el coronavirus. Militares de la Unidad Militar de Emergencias patrullarán la Estación de Sants, las Ramblas o la Plaza de Sant Jaume. Todo coherencia, sentido común y un espíritu nada centralizador. La situación es esperpéntica. Ladran que el Presidente Torra es un demonio por oponerse a medidas absurdas e ingenuas, mientras que ellos han venido a salvar España por obra y gracia de la divina providencia envuelta en la rojigualda. Qué país. Desgobierno absoluto.

Margarita Robles ministra defensa efe

La pregunta es: ¿hay alguien al frente de Moncloa con una pizca de juicio? La respuesta es devastadora. Ahora bien, nos querrán sometidos, pero no podrán callar a la sociedad, indignada y encendida por la emergencia y el desbarajuste. Uno de ellos es Antonio Baños, tan contundente como crudo. El mensaje a Sánchez o Margarita Robles, ministra de Defensa perdida en la inoperancia, de los que pasan a la historia: "Traed material médico y no militares, hijos de la gran...". Muy duro, sí, pero impepinable.

Antonio Baños TV3

El desbarajuste es dramático. Y lo peor de todo: con estas medidas, el final del túnel no sólo no se ve. Es que cada vez parece más oscuro y lejano. Eso sí: el apocalipsis llevará banderita española y uniforme militar. Todos salvados.