Cristina Pedroche está de enhorabuena. Antes de cumplir, como cada año, sorprendiendo a todos los espectadores con su vestido para las campanadas, la presentadora de televisión dejó a todos los seguidores con la boca abierta compartiendo su mejor noticia, su embarazo. Realmente, el comunicado fue muy extraño, porque aprovechó el día de los Inocentes para publicar un vídeo fantástico con Dabiz Muñoz y, como es habitual el 28 de diciembre, todo el mundo dudó de todo. Después de que la exclusiva siguiera durando al día siguiente por la mañana, todo el mundo estalló de alegría. La pequeña Laia, la primera hija, tendrá un hermanito y, de hecho, la protagonista ya ha confirmado que le pondrán un nombre vasco.
Es un hecho, la presentadora de televisión utiliza su perfil de las redes como si fuera un auténtico diario personal. No hay día en que no publique cualquier pensamiento o preocupación que le haya pasado por la cabeza y estaba claro que tendría a los seguidores a la última hora de todo su embarazo. De hecho, paso a paso, la protagonista enseña cómo le va creciendo poco a poco la barriga y ha confesado que el segundo no le está pareciendo tan fácil como el primero. Realmente, Pedroche tiene a los seguidores encantados con su última hora, pero parece que no todos, porque hace unas semanas tuvo que sacar las garras para callar a un hater que estaba cansado de tantas referencias al embarazo. Desde que la protagonista vuelve a estar embarazada, la vemos más nostálgica que nunca y la semana pasada nos sorprendió con una fotografía suya de pequeña que había en la habitación de su madre.
Ayer, en el repaso prácticamente diario de su día, la presentadora sorprendió con una escena que le tocó la fibra: "He tenido una reunión por la tarde que me ha encantado, pero se me ha activado la parte de creatividad a tope y estoy como nerviosa... y luego he ido a la presentación del libro de @madremente y se me ha removido todo mucho al escucharla a ella y a otras madres que han ido porque qué guay cuando hay un lugar en el que te sientes segura, escuchada y atendida". En medio de la librería donde hacían la presentación, una de las madres se le ha acercado agradecida y Pedroche se ha emocionado: "Se me acercan madres como hoy a darme las gracias por contar mi historia, porque les ha servido mi libro para no sentirse solas y se me llena el corazón (y los ojos de lágrimas) y pienso que todo merece la pena".
Sin duda, Cristina Pedroche es una referencia y sirve de ejemplo para todas las chicas que se quedan embarazadas. Nos encanta ver como poco a poco le va creciendo la barriga y, para nosotros, que no pare nunca de explicar cualquiera de sus sentimientos. Contamos los meses para ver la llegada del pequeño con nombre vasco. Nunca nos cansaremos de darle la enhorabuena.