Con el dinero de uno, cada uno se los gasta como quiere pero cuando eres un personaje público, las formas también cuentan. Que le pregunten al tenista mallorquín Rafa Nadal y su última adquisición: un catamarán de cinco millones de euros para navegar las costas del Mediterráneo que tiene al lado de su casa. Muchos, a través de las redes, le reprochan el enorme gasto que ha hecho en tiempo de coronavirus y se preguntan si realmente era necesario.

Además, hay que recordar que Rafa Nadal forma parte de la campaña del gobierno estatal por la lucha contra la pandemia donde envía mensajes de ánimos y quiere mostrar su faceta más solidaria. Un anuncio que ha hecho al lado de Pau Gasol o Fernando Alonso. De hecho, con Cruz Roja incluso piden recaudar dinero a través de un número de cuenta corriente. Y, en paralelo, hay que recordar que se reunieron por videconferència con los Reyes de España para analizar la situación de la Covid-19 en nuestra casa. Un encuentro que muchos no entendieron.

El catamarán que ahora se ha comprado Nadal sustituye el antiguo yate Beethoven que puso en venta el verano pasado por 2,6 millones de euros. El de ahora es mayor y cuenta con 1.200 metros cuadrados.

Comentarios hay de todo tipo. Unos defienden que si se los ha ganado se los gaste con lo que quiere y otros le recuerdan o le preguntan dónde tributa sus impuestos. Hay que recordar que, a pesar de su patriotismo español, Nadal también ha sido investigada por Hacienda para tributar donde no le corresponde. El caso de que de momento ha salido a la luz es el que declaraba sus impuestos en el País Vasco a pesar de ser de las Baleares. Posteriormente también salió en el famoso escándalo de los papeles de Panamá.