La gran confusión es lo que tiene la productora donde trabaja Xavier Sardà. Visiona TV, una pequeña empresa de Barcelona a cargo del productor Ferran Cera, ha conseguido colocar en TVE el programa Obrim fil que ya emitía en La 1 en catalán sólo por TVE-Catalunya. No le han llamado Abrimos hilo para que no parezca lo mismo, pero es lo mismo. Toda la crítica se les ha tirado en la yugular por repetir punto por punto temas, invitados, encuestas, que el programa que ya cobraron una vez. Ahora más y para toda España. Y la audiencia es la normal de La 1, o por debajo. El último sábado, con el programa ya relegado de madrugada por no haber satisfecho las expectativas, hizo un flojo 6,4% en España, más alto en Catalunya donde TV3 tampoco gusta. Los sábados son el día con el menor consumo televisivo de toda la semana. Y allí malviven Ustrell y Sardà. ¿A qué precio?
El partido de ultraderecha Vox tiene una obsesión contra los presentadores catalanes unionistas que ficha el PSC para TVE. Le pasó con Andreu Buenafuente, que cobra 4500 por programa, y ahora con Xavier Sardà. El partido de Santiago Abascal pregunta a TVE cuánto cobra Buenafuente o cuánto cobra Sardà. Y como es público pero no se ha publicado, TVE responde. El presupuesto de los 10 programas contratados es 1,8 millones de euros. Por lo tanto cada programa cuesta 180 mil euros en el erario público, de los cuales menos de un 5% van al bolsillo de Sardà que sólo es el presentador. Xavier Sardà cobra, según TVE, 7 mil euros por programa.
Un programa caro, hecho a Catalunya y que no acaba de gustar en España, a pesar de apostar por caras españolas de los 90 como Ana Obregón, Bertín Osborne o el mismo Sardà. Un cómico, preguntado al programa sobre cómo ha cambiado la tele, respondía: "Nada, sigue saliendo Jordi Hurtado y Xavier Sardà". Buena ironía pero señal que alguna cosa falla. Sardà no es el director del programa, y sólo Gestmusic lo hizo saber brillar como nunca. Sardà va, pone la cara y la tablas y deja hacer, pero todos añoran Crónicas marcianas. Y ahora sólo vive de refritos: Dutyfri era un refrito de Afers exteriors. Juego de niños era un refrito del concurso infantil de hace 20 años y ahora La gran confusión es un refrito que ya hemos visto hace nada.
Ferran Monegal le decía :"Sigue inexplicablemente Xavier Sardà repitiendo en ‘La gran confusión’ los mismos temas que ya nos colocaba hace año y medio cuando hacía el ‘Obrim fil’ en TVE Catalunya. Planteaban ‘¿Somos buenos vecinos?’, mismo título y asunto que el que nos planteó en el circuito catalán (‘Som bons veins?’). Por repetir hasta ha repetido invitados –la exmodelo Judith Mascó, o el presidente de comunidad Xavi Pérez Esquerdo– y cabe preguntarse si TVE considera sensato insistir para todo el territorio estatal lo que no funcionó en Catalunya"". Pues a 7 mil euros la pieza. Quedan sólo 3 programas por emitir.