El Futbol Club Barcelona es un auténtico misil. Después de convertir en gloriosa una de las semanas más complicadas de los últimos años, el conjunto culé ha vuelto. Las alegrías de los aficionados han sido bienvenidas en la ciudad de Barcelona y la bandera azulgrana vuela como nunca en los balcones de todos los barcelonistas. Padres, madres, hermanos, hermanas, abuelos, abuelas... nadie se quiso perder el Clásico este fin de semana. El resultado 0-4 es una muestra del buen juego desarrollado toda la temporada. Con Hansi Flick como entrenador, los jugadores en lugar de correr, vuelan y desprenden felicidad allí donde van. El equipo es una mezcla de niños de la ESO y abuelos que están a punto de entrar en la residencia. Con este batiburrillo de personas parece que la cosa tendría que ir mal, pero el padre de todos, Hansi Flick, ha conseguido una cosa que nadie se hubiera imaginado.

Hansi Flick dando instrucciones durante un partido con el Barça / Foto: EFE
Hansi Flick dando instrucciones durante un partido con el Barça / Foto: EFE

Un aspecto tienen en común todos los jugadores que están subiendo con este nuevo Barça: todos son más culés que nunca. Todo el mundo corre para ganar, pero también para defender los colores del Barça. El hecho de que muchos de los futbolistas se hayan hecho grandes a la Masia es determinante para que sean tan y tan culés. Parece que cuanto más pequeños, más brillan. Uno que parece un veterano y no llega a ser mayor de edad es Pau Cubarsí. El defensa brilló con Xavi la temporada pasada y esta sigue siendo esencial en el juego del equipo. La defensa avanzada que plantea Flick es una de sus principales razones para que los resultados brillen y Cubarsí, junto con Íñigo llevan la defensa como quieren. El del plantel ya es uno de los mejores defensas del panorama y, aparte de ser más culé que el escudo, es muy catalán.

Pau Cubarsí / Instagram
Pau Cubarsí / Instagram
Pau Cubarsi jugando con el Barça / Foto: Europa Press
Pau Cubarsi jugando con el Barça / Foto: Europa Press

Hoy se celebra la Gala del Balón de Oro en París y, aparte del mejor trofeo individual del planeta, también se dan algunos premios como el Trofeo Kopa, galardón que opta Pau Cubarsí. Es una evidencia que el principal preferido a llevárselo es Lamine Yamal, pero deportivamente viaja a la gala, por si suena la flauta y para aplaudir desde la sala a su compañero de equipo. Su nombramiento no se lo ha querido perder nadie y en el avión, con todos los jugadores y jugadoras, también ha viajado el padre de Pau Cubarsí. La fotografía la ha colgado por sorpresa el padre de Lamine Yamal que, abrazado a los dos, ha mostrado la semejanza entre Cubarsí hijo y Cubarsí padre. La mirada, la nariz, los dientes, a pesar de ser una réplica de su madre, el defensa del Barça también se parece mucho a su padre. Una diferencia entre los dos rostros marca la fotografía, su peinado.

El padre de Lamine no se ha privado de nada y con una sonrisa de oreja en oreja ha mencionado en la publicación a Robert Cubarsí. El hombre tiene el usuario privado, pero su foto de perfil es fantástica. Con unas gafas de sol y sin camiseta, el padre muestra la sonrisa típica de los Cubarsí. Como toda la familia culé, Robert Cubarsí está orgullosísimo de todo lo que está consiguiendo su hijo. El defensa del Barça augura a marcar una época al conjunto culé y toda la afición lo sabe. Al Lluís Companys ya suena el "Cu-cu-cubarsí" y, poco a poco, va cumpliendo el sueño de todos los jugadores de la Masia. Pau Cubarsí no supera los 18 años y ya es uno de los jugadores más carismáticos de la plantilla. Culé como él solo, el jugador nos ha dejado momentos espléndidos como catalán. Las canciones de victoria del Barça seguirán cantándose en el precioso idioma gracias a él. Que siga sonriendo, porque sus alegrías serán las nuestras.