Parece que las cosas no están marchando sobre ruedas para Dabiz Muñoz y Cristina Pedroche. Si te creías que esta pareja vivía un cuento de hadas, debemos contarte que la realidad podría ser un poco menos brillante. Ahora mismo, en su terreno personal, están disfrutando de uno de los momentos más dulces después de dar la bienvenida a su hija Laia el pasado 14 de julio. Pero en ell ámbito profesional, las cosas cambian. Una nube negra en lo laboral podría acabar derramando un poco de lluvia en su felicidad como padres primerizos.
Según la revista Semana, Dabiz Muñoz se encuentra en una situación un tanto complicada debido a las crecientes deudas de su empresa 'Pig Wings'. Parece que esta sociedad está arrastrando un patrimonio negativo que supera los tres millones de euros, y ya se está hablando de la posible disolución de la empresa debido a tantas pérdidas, según informa El Confidencial.
Problemas económicos para Dabiz Muñoz y Cristina Pedroche
En todo caso, por el momento Muñoz ha decidido aprovechar la amnistía contable que el gobierno de Pedro Sánchez ha dado por aprobada, intentando evitar así el riesgo de bancarrota. Con esta medida, se asegura de que las empresas que sufrieron durante la pandemia no tengan que enderezar su balance patrimonial hasta finales del próximo año.
Sin embargo, no podemos pasar por alto que esta no es la primera vez que el chef ha tenido sus problemas en el terreno económico. Ya le sucedió anteriormente a raíz de la pandemia en 2021. Incluso, el mismo Dabiz ha salido a reconocer que tienen varias deudas que están pagando a duras penas.
La mala racha económica también se ha trasladado a su restaurante en Londres, el cual no logró conquistar el paladar de la misma manera que su establecimiento en Madrid. Y la cosa empeoró con las restricciones impuestas por el COVID-19, que le costaron un dineral en gastos solo para mantener las puertas abiertas.
La crisis económica afecta en el día a día del matrimonio
En el caso de Cristina Pedroche, las cosas tampoco están marchando del todo bien en su carrera profesional. La repercusión de Cristina no termina de despegar como querría. Los proyectos que pone en marcha no suelen tener final feliz. Las audiencias no responden cuando presenta algún programa en solitario, lo que limita su trabajo y sus ingresos a sus colaboraciones en Zapeando o a los patrocinios en Instagram.
Una crisis económica que, como ocurre en la mayoría de parejas, pasa factura en el día a día del matrimonio. Es inevitable que los problemas monetarios no les permitan disfrutar en plenitud del momento dulce que atraviesan en el plano personal. La escasez económica no permite a Dabiz y Cristina tomar las decisiones que les gustaría. Solo la fuerte unión que mantienen en lo sentimental les permitirá superar el complicado momento que atraviesan en lo profesional.