Todavía tiene las marcas de las heridas muy vivas, pero el actor Dani Rovira vuelve a ser el que era. De hecho, se podría decir que nunca ha dejado de serlo. El malagueño es optimismo, buen humor y habla sin ambages, incluso en los peores momentos de su vida. Y el mal trago del cáncer ha sido durísimo, pero ha le ha hecho frente con determinación. Y, seguramente, parte de su recuperación tenga que ver con su actitud ante la adversidad. Un buen ejemplo, lo que ha confesado en una entrevista radiofónica.

Dani Rovira ríe recordando cómo se enteró del cáncer / Cadena SER

Rovira explicaba cómo recibió la noticia de que sufría el linfoma de Hodgkin. Mejor dicho, cuál fue la consecuencia inmediata: perdió el conocimiento por la impresión: "soy muy tendente a desmayarme. Dije oye, me estoy mareando y me tumbé. Perdí el conocimiento y todo." Lo pusieron en una camilla y se lo llevaron a quirófano, donde le practicaron una biopsia que confirmó la enfermedad. Al despertar, en vez de hundirse, sacó el cachondeo que le caracteriza: "le dije al médico: que sepáis que tengo en audio todo grabado, si habéis despotricado lo tengo grabado". Ha añadido que todavía no ha escuchado aquella grabación, pero por si acaso...

Dani Rovira curado del cáncer / @danirovira

No sabemos si se atreverá a oir aquellos minutos de incertidumbre y sufrimiento, pero a buen seguro que la grabación le parecerá como un 'souvenir' extraño del viaje más importante de su vida.