Will Smith es una de las grandes estrellas de Hollywood, pese a no estar pasando su mejor momento de fama tras aquel incidente en los Oscar donde abofeteó a Chris Rock. Desde entonces ha intentado seguir con su vida y con su carrera, y ahora, en una charla con Kevin Hart, mira atrás y analiza algunos de sus actos a lo largo de las décadas que lleva trabajando, y dice arrepentirse de algo, de haber forzado el lanzar a sus hijos Jaden y Willow Smith a la fama.
En 2010, los hijos de Will Smith se convirtieron en preadolescentes famosos y prometedores en Hollywood. El joven debutó como actor principal en el remake de Karate Kid, mientras que la chica alcanzó la fama con su canción "Whip My Hair", llevándose a casa un disco de platino. En ese momento, el protagonista de ‘Soy Leyenda’ estaba decidido a convertirlos en celebridades a toda costa, pero ahora, 13 años después, se arrepiente de esa decisión.
En una conversación con Kevin Hart, Will Smith admite que trató de construir el sueño de la familia que tenía en mente, influenciado por el deseo de superar su propio pasado, y ser un mejor padre que su propio progenitor, quien fue abusador. Sin embargo, se dio cuenta de que estaba actuando más como un manager que como un padre, y eso afectó negativamente a la felicidad y la unión familiar. "Nadie era feliz en mi familia. Nadie quería ser el miembro de un pelotón", recuerda el famoso.
En estos planes tan ambiciosos, añade el actor, tenía mucho que ver la carga de su propio pasado, bajo el lema "Voy a hacerlo mejor de lo que lo hizo mi padre". "Ya hemos hablado de ello: mi padre era un abusador... Me dije a mí mismo que nunca tendría esa clase de energía con mi familia, y tenía un sueño, una idea de la familia que estaba construyendo. Entre 2010 y 2012 había logrado todos mis sueños. Había superado mis sueños más salvajes". Will Smith admite que nunca fue infeliz, pero reconoce que su manera de dirigir a las personas a su alrededor dejaba un rastro de descontento. A través de esta experiencia, ha aprendido a valorar más la felicidad y el bienestar de su familia por encima de la fama y el éxito en el mundo del espectáculo.
Jaden y Willow Smith se mantienen bajo perfil en el mundo del estrellato
Jaden y Willow Smith, pese a mantener un perfil bajo en la actualidad, hace más de una década saltaron al estrellato tanto en la música como en el cine. Fue a comienzos de la década del 2010, cuando Will Smith pensaba que estaba bien lo que hacía.
Will Smith dejó de ser padre para convertirse en el manager de sus hijos
Will Smith no tardó en darse cuenta de que estaba portándose más como un manager que como un padre. Y que, a consecuencia de esa obsesión, sus lazos familiares se estaban resintiendo.