More Demi Moore. Más Demi Moore. Durante los años 90 todo el mundo quería a la actriz norteamericana en sus pelis y encadenó blockbusters de taquilla baratos, sin mucho coste. Entre el 90 y el 97 hizo Ghost, Algunos hombres buenos, Una proposición indecente, Acoso, Striptease y La teniente O'Neil. Los Oscars eran para otros, como la médium Whoopi Goldberg de Ghost, o las estrellas eran otras, como Jack Nicholson, Tom Cruise o Robert Redford. Ella era la guapa, fuerte, sexi y dura. Cobraba un millón de euros a fin de que Redford se la llevara a la cama, en la ficción. No podía hacer más pasta en la taquilla, la mujer de Bruce Willis. Ahora ha hecho un pequeño papel en la TV de pago en la serie Feud: Capote versus The Swangs donde interpreta a uno de los cisnes, las mujeres ricas a quien Truman Capote destripó. Está espléndida, operada, abuela y acompañante a su nieta a la piscina en bikini blanco. La foto la hace Rummer Willis, una de sus hijas:
Un diminuto bikini color blanco mientras ayuda a su nieta, Louetta Isley de 15 meses, a dar los primeros pasos. Un look que ha completado con una gorra azul marino y sandalias Birkenstocks para dar un paseo con la hija de Rumer por el muelle. La célebre actriz parece haber hecho un pacto con el diablo y con el cirujano plástico después de haber pasado la frontera de los 60 años. La estrella ha protagonizado esta fotografía comentada mientras ha celebrado el 33 aniversario de su hija Scout, fruto de su relación con Bruce Willis. Ninguna otra actriz abuela de Hollywood de 61 años se resiste a aparentar ser sexagenaria como Demi Moore. La teniente O'Neill se caracterizó toda su filmografía para ser la más escultural y explosiva de la cartelera. La tímida protagonista enamoradiza de Ghost le sirvió solo para ceder un Oscar a la afroamericana Whoopi Goldberg. Y claro, desde aquel chasco Demi Moore ya no aspira a los galardones de buena actriz. Encasillada y rica. Tom Cruise y ella están para llenar plateas y dar belleza, pero que el secundario se os coma, como Jack Nicholson (¿"Ordenó usted el código rojo"?). Moore ya hace demasiado que no hace películas, desde el remake de Los Ángeles de Charlie. Así que hace posts de Instagram. Muchos con bikinis, de leopardo incluso:
Demi, divorciada de Bruce Willis, separada de Ashton Kutcher, es madre de tres hijas, Rumer, Scout y Tallulah y ahora luce nietay pómulos mucho más suavizados. Cada vez que publica una fotografía, recibe miles de likes y centenares de comentarios de 5,3 millones de seguidores. La yaya Moore.