Julio Iglesias, uno de los artistas más famosos a nivel mundial, es conocido no solo por su exitosa carrera musical, sino también por su vida personal llena de historias románticas y relaciones mediáticas. Una de las más comentadas fue la que sostuvo con Isabel Preysler. Sin embargo, no todo en su relación fue amor y armonía, ya que la madre del cantante, doña Manuela, tenía opiniones muy particulares sobre su nuera.
En la época de su relación con Isabel Preysler, que comenzó a principios de los años 80, los vínculos familiares fueron una de las piedras angulares en la vida del cantante. La figura de su madre fue siempre muy influyente, y su carácter férreo marcaba la dinámica familiar. Aunque la relación entre Julio Iglesias y la socialité era una de las más publicitadas en la sociedad española, detrás de las cámaras existía una tensión constante por parte de la matriarca de los Iglesias.
Según diversos relatos y testimonios, Manuela Puga Noguerol, más conocida por ser la progenitora del artista más grande de España, nunca estuvo de acuerdo con la relación que mantenía su hijo con la que se convertiría en su nuera. A pesar de la popularidad y la belleza de la filipina, le asignó un apodo despectivo, el cual refleja la desaprobación y el desprecio que sentía hacia ella. Sigue leyendo para conocer todos los detalles.
Pasará a la historia, la madre de Julio Iglesias ‘bautizó’ a Isabel Preysler con un sobrenombre especial
El apodo en cuestión era "la china", una etiqueta que no solo hacía referencia a su origen natal, sino que también denotaba la opinión de la madre de Julio sobre la mujer con la que su hijo compartía su vida en ese momento. El rechazo hacia Preysler era palpable, utilizado para marcar una distancia entre nacionalidades. Además de eso, representaba una “falta de pureza”. Dado que entre sus planes estaba que su hijo contrajera matrimonio con una madrileña de clase alta, una mujer que lo centrara en la carrera de derecho. Sin embargo, y contra todo pronóstico, Iglesias se casó con la ‘reina de corazones’ e incluso tuvieron tres hijos juntos.
Esta relación, aunque no exenta de conflictos y tensiones familiares, fue una de las más comentadas en la España de los 80. Sin embargo, es interesante observar cómo los lazos familiares y las tensiones generacionales influían en las decisiones personales y sentimentales del intérprete de 'Me va, me va', y cómo las figuras maternas podían tener un impacto tan directo en las relaciones amorosas de sus hijos.
Isabel Preysler era "la china" y permaneció en el imaginario de la familia de Julio Iglesias durante muchos años. Este fue uno de esos pequeños detalles que, pese a que en su momento pudieron parecer insignificantes, demuestran el rechazo que surge con las expectativas sociales y familiares. Si bien los años han pasado y las circunstancias han cambiado, el eco de esos tiempos sigue resonando en la memoria colectiva, recordándonos cómo los lazos humanos pueden ser mucho más complejos de lo que parecen a simple vista.